Hace un poco más de un año, la Federación Chilena de Hockey Césped sorprendía con la contratación de Sergio Cachito Vigil como entrenador de la selección femenina. El transandino había sido el responsable del gran salto de calidad que dieron las leonas argentinas y que las llevó a ser campeonas del mundo en 2002 y subcampeonas olímpicas en Sídney 2000.
El DT, considerado como el Bielsa de la disciplina, sólo puso una condición: la construcción de una cancha permanente. Y vencido el plazo, la petición no se concreta. Pero no importa. Cachito se desdice y se queda. Entiende los retrasos y confía en que cumplan lo prometido.
"Lo primero que veo es el compromiso de la dirigencia por querer llevarlo adelante. Me han confirmado que ya está aprobado y que sólo faltan los últimos detalles. Entonces, creo en esa palabra", afirma el entrenador.
En ese contexto aclara: "Lo importante era que a fin de 2016 ya estuviera concretada la posibilidad de instalación de cancha y prácticamente eso estaría hecho. Es sólo cuestión de detalles. Y si eso es así, veo que hay un compromiso con el hockey y con el futuro".
Los detalles que alude Vigil tienen relación con la distribución que tendrá la pista en un sector del Estadio Nacional donde actualmente hay una serie de canchas de fútbol. Al respecto, César Vaccia, ex entrenador de Universidad de Chile y de la Selección y actual director ejecutivo de la Corporación de Deportes de Ñuñoa, ratifica las conversaciones: "Hubo una reunión con la gente del IND y el alcalde Andrés Zarhi, y hay una total disposición. Debemos coordinar bien el tema de las canchas de fútbol y cerrar algunos detalles para que se concrete la instalación de la de hockey. Creemos que también puede ser un aporte a la comunidad".
Cachito, eso sí, está consciente de que no puede pasar mucho tiempo: "Es una gran limitación para nuestro crecimiento no tener la cancha. Cada día que pasa es en detrimento del sueño mundial y olímpico del hockey chileno. Si no, el sueño no es posible y yo creo que las jugadoras han mostrado una enorme profesionalidad para encarar el desafío mundial y olímpico, que se puede llegar a dar en el corto o en el mediano plazo. Pero ya han emprendido un camino mundial y olímpico, que no tiene retorno en sus mentes. Han puesto el hockey en primer lugar y esto es valiosísimo y es un mensaje inmenso".
Por estos días, Vigil saca alegres conclusiones de la gira de casi dos semanas que la selección realizó por Sudáfrica, donde se enfrentó a grandes potencias en seis tests matches: "Fue una gira espectacular, fuimos con 21 jugadoras y todas jugaron. A mi criterio, fue una gira bisagra. Crecimos mucho en el córner corto, donde Alfredo Castro y Diego Amoroso son los encargados de trabajar ese aspecto. Además, la labor de Cristian Barra en la preparación física fue espectacular. El equipo mostró una gran condición y fue el único que jugó cuatro partidos seguidos".
Entrega de las Diablas
Pero además de la pronta instalación de la cancha, el coach asegura que otro poderoso motivo para permanecer en Chile tiene directa relación con lo que ha visto en el plantel: "El equipo tiene un sueño grande y ha trabajado mucho para ese sueño. Y, junto con el staff, estaremos cien por ciento acompañando este sueño. Es el compromiso con un equipo que entrega todos los días todo y eso emociona. Entonces, las chicas me llevan a seguir creyendo que el sueño es posible".
Dentro de un par de meses, viene el primer gran desafío de las Diablas, cuando disputen la segunda fase de la World League, que se realizará en Vancouver, Canadá, entre el 1 y 9 de abril, y que tendrá a la selección local; México; Trinidad y Tobago; Uruguay; India y Bielorrusia entre los participantes.
"Hay que trabajar, crecer y prepararnos para ese torneo tan importante que vamos a jugar en abril y que será durísimo para todos, ya que dos equipos clasificarán a la World League 3 para seguir la ruta mundial. Nuestro objetivo es pasar, sabemos que será durísimo, pero nuestro equipo cada vez está más fuerte, más sólido y más convencido", asegura.