Hay que salir a terreno y dar la cara. Que deje de ser el ministro de las "turbinas y las torres" y entre en los hogares. Ese es el mensaje que transmitían los actores Alex Zisis y Gregory Cohen a Máximo Pacheco mientras lideraba el Ministerio de Energía.

La cartera contrató por $ 45,8 millones dos proyectos con Zisis & Asociados Limitada, uno para la "ciudadanización del Ministerio de Energía", que buscaba "fortalecer las acciones del ministerio para que, además de su signo de motor de la economía, sea reconocido por resolver los problemas reales de la ciudadanía, de manera cercana, empática y oportuna", dice el documento de agosto de 2015.

Otro era una asesoría para el desarrollo de habilidades de comunicación y liderazgo del ministro, que contemplaba "trabajo con elementos audiovisuales, juegos de lenguaje, miradas y otros". Estas herramientas, según cercanos a Pacheco, ayudaron al ministro a tener un discurso más asertivo y enfrentar situaciones como ir a exponer con éxito frente a cientos de ambientalistas en Puelo o Coronel que se oponían a proyectos eléctricos.

Al asumir el 19 de octubre como jefe del equipo programático de Ricardo Lagos, Pacheco -militante socialista- dejó el gobierno siendo, según Adimark, uno de los seis ministros mejor evaluados del gabinete y con un porcentaje de conocimiento superior al 50%.

¿Cómo logró convertir un ministerio sectorial y técnico, como es Energía, en una plataforma política? Una de las respuestas la da la importante inversión que hizo durante su mandato en encuestas de opinión, campañas comunicacionales y medidas para acercarse a la ciudadanía.

A la par con la agenda energética e iniciativas de impacto nacional, como la licitación del suministro eléctrico, que ha tenido más partidarios que críticos, Pacheco dedicó largas horas cada semana a almuerzos y conversaciones de pasillo con parlamentarios de todos los sectores políticos para sacar proyectos de consenso, como la nueva ley de transmisión eléctrica, apoyada desde la derecha hasta Camila Vallejo y Cristina Girardi.

Pero también ocupaba su tiempo en frecuentar matinales de televisión para explicar asuntos como el nuevo etiquetado de los electrodomésticos, el uso de las ampolletas de ahorro, el alumbrado público o, lo que fue su mayor dolor de cabeza, la fijación del horario de invierno y verano, asunto que generó fuerte debate y que, según Pacheco, ha reconocido en privado, le sirvió de aprendizaje político sobre la necesidad de estudiar el impacto de las medidas en la ciudadanía.

Tras vivir 10 años en Brasil, donde se desempeñó como presidente de International Paper, Pacheco -quien es bisnieto del ex Presidente Arturo Alessandri e hijo del ex senador DC Máximo Pacheco Gómez- recién se reencontró con la actividad política al volver a Chile a fines de 2013.

"Cuando asumí, muchos dijeron: 'Pusieron gerentes en los ministerios'. Pero yo no era sólo un gerente, sino que era alguien que tiene raíces en la política y sangre política . En mi familia la política ha estado siempre, y sé lo compleja que es como actividad. Y, en este sentido, en el ministerio aprendí una cosa: hay que dar la cara, hay que estar cerca de la gente, hay que hablar con la gente", dice el ex ministro.

Publicidad y encuestas

Además de las asesoría prestadas por la productora Zisis & Asociados Limitada, Pacheco contrató otros servicios destinados a conocer la percepción de los programas de la cartera.

Es así como en enero de 2015 el Ministerio de Energía, a través de la subsecretaria Jimena Jara, pagó $ 155 millones, por la vía del trato directo, a la agencia de publicidad Deluxe Limitada. ¿El motivo? Obtener "servicio de difusión y publicidad para el Proceso de planificación participativa de la política energética de largo plazo-iniciativa 2050". De acuerdo al contrato, esta firma debía generar una "estrategia digital para aumentar la participación y registro en la plataforma ciudadana energia2050.cl, así como en las redes sociales". También, crear un plan de medios y "difundir y dar credibilidad al proceso".

Un año después, en febrero de 2016, Energía contrató a la empresa Ekhos S.A. por $ 44,7 millones, para la ejecución de una "estrategia y plan de comunicaciones período 2016". Esta consultora mantiene numerosos contratos con el Estado y, hasta 2013, figuraba como socia Alejandra Jorquera, pareja del subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy. Esta firma, además, la integra Claudio Rutllant, ex ejecutivo de Imaginacción, propiedad de Enrique Correa.

En tanto, en mayo de 2016 el centro de estudios Market Opinion Research International (Mori), que dirige Marta Lagos, fue contratado por vía directa para darle a conocer al Ministerio de Energía la percepción ciudadana en este ámbito, aun cuando la cartera realiza, desde 2015, su propia Encuesta Nacional de Energía. Por estos servicios el Estado desembolsó $ 20 millones, y se canceló mediante cuatro pagos de $ 5 millones por realizar igual número de encuestas de 10 preguntas cada una.

Tres meses después, Mori fue nuevamente contratado, por la suma de $ 4,8 millones, para la realización de seis focus group "para conocer cómo la población percibe la agenda de Energía, por una parte, y por otra, la política energética a largo plazo impulsada por este ministerio".

Los resultados de todos estos sondeos fueron declarados confidenciales por parte de Energía.