Cristián Suárez debía presentarse en la medianoche del domingo a Juan Pinto Durán, como el resto de la Selección. Pero no llegó. El defensor de Universidad de Chile había presentado molestias musculares durante la semana, pero en el cuerpo médico de la Roja habían descartado una lesión importante. Aún así, le habían diseñado una rutina especial de trabajo.

Ante la insistencia del defensor, el sábado lo sometieron a una revisión médica. Mediante un comunicado, la ANFP manifestó que los exámenes habían resultado negativos. Es decir, que Suárez  no acusaba lesión alguna. Aún así, esperaban someterlo ayer a una nueva evaluación para definir si Jorge Sampaoli lo podría considerar para el partido frente a Estados Unidos. El ex loíno se automarginó.

La visión de la Roja se contrapone con la de Universidad de Chile. En el Centro Deportivo Azul, Fernando Radice, quien encabezael staff de especialistas que atiende al plantel, aseguró que hay dolencia. Sin embargo, aclaran que lo entregaron en perfectas condiciones.

Carcuro, en cambio, dice que el jugador presentaba molestias "menores" a su llegada, después del duelo entre los azules y Santiago Wanderers. "De jueves a viernes en la mañana, dice que se intensificó el dolor, por lo que se le dio descanso y el sábado se le sometió a un examen. El cuadro no era de una magnitud mayor, por lo cual se va a descansar como el resto de los jugadores", declaró.

Ayer, Banana fue sometido a una revisión en la U que arrojó edemas en el abductor derecho y en el psoas. Por esa razón, el futbolista deberá permanecer en tratamiento diez días.

Aún así, su inquietud no sólo tiene que ver con su evolución. El defensa presume que no tendrá otra chance antes de la Copa América y que, como en otros casos, Sampaoli podría tacharlo de su lista por un buen tiempo. "Pensaba que con un llamado telefónico se iba a solucionar todo. A uno le gusta vestir la camiseta de su país. Espero no que no se cierren las puertas", rogó a través del sitio web de los laicos.