Ayer, los cuatro comuneros acusados por el atentado al fiscal Mario Elgueta decidieron deponer la huelga de hambre que se extendió por 87 días. Posterior a esto, deberán ser sometidos a un lento proceso de realimentación e hidratación, para recuperar los kilos y las energías que perdieron durante el ayuno.

El médico internista de la Red de Salud UC, Franco Utili, explica que el proceso de realimentación al que debe ser sometida una persona que depone una huelga de hambre debe ser estudiado y analizado de acuerdo a las condiciones que alcanzó durante el ayuno, es decir la cantidad de días, el peso perdido y el estado de la masa muscular. Señala que de ninguna manera se los debe someter a una realimentación agresiva.

"Una realimentación agresiva puede ser peligrosa, porque puede generar un trastorno en el equilibrio precario que tenían antes de deponer la huelga. Por lo tanto, tiene que ser una cosa muy programada, en una forma progresiva ir realimentando de tal forma de estar monitoreando todos los cambios en los parámetros en los exámenes de sangre y electrocardiograma que tienen estas personas", señala el médico.

Sobre las consecuencias que pueden tener los comuneros, Utili es claro en señalar que depende de cada persona, pero que pueden quedar con secuelas crónicas. "Estas personas, lamentablemente, pueden tener secuelas a futuro, con algunas secuelas crónicas", dice.

El especialista agrega que lo más difícil de recuperar tras un ayuno prolongado es la masa muscular. "Si eso (el ayuno) ha significado una pérdida importante de masa muscular, es poco probable que la persona vuelva a tener la misma cantidad de músculo que tenía antes. Esto requiere además de una buena realimentación, de una actividad física adecuada para poder ir recuperando la masa muscular que se ha perdido", indicó.

Franco Utili además dijo que "si ha habido un enflaquecimiento de la masa muscular cardíaca, es prácticamente irrecuperable, eso genera una deficiencia que es bastante prolongada en el tiempo".

Por último, y en el caso de los cuatro comuneros mapuche que depusieron la huelga, el médico reitera que lo más difícil será recuperar la masa muscular debido a la recurrencia de las huelgas de hambre. "Si hay una serie de fenómenos que son recurrentes, la masa muscular no la van a recuperar con facilidad, y si ya habian sido sometidos a una huelga previa podrían tener un problema en ese sentido", puntualizó.