Durante 20 años el escocés Terence Teven de 55 años,  fue un adicto a la heroína, su salud estaba decayendo, ya no sentía confianza por sí mismo y la dignidad había desaparecido.

Estuvo limpio por un tiempo, pero cayó en una depresión. La heroína lo había destruido física y mentalmente, incluso por un tiempo estuvo viviendo en las calles.

"La heroína prácticamente destruyó mi vida. Estaba completamente destrozado. Apenas podía caminar, comía muy poco y mi autoestima había desaparecido. Me sentía avergonzado y me convirtió en un indigente", declaró al medio escocés Daily Record.

Cansado de esa vida buscó ayuda a Narcotics Anonymous para rehabilitarse, recurrió al Salvation Army (Ejército de Salvación), otra fundación de rehabilitación y comenzó a practicar Bikram Yoga, la misma que se convirtió en su pasión.

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(Photo: Garry F McHarg/Daily Record)

(Photo: Garry F McHarg/Daily Record)

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Este tipo de disciplina se caracteriza en practicar diferentes posturas del yoga, pero dentro de una sala que mantiene una temperatura de 42°.

"Cuando por primera vez fui a la clase, mi cabeza estaba gacha y no podía ni hacer contacto visual con otras personas, pero me puse de pie por primera vez en años", relata al medio.

"Me dio confianza en mí mismo. Quiero que la gente sepa que puedes recuperarte de un largo periodo de abuso a las drogas y el yoga puede ser beneficioso para la recuperación. Ha hecho mucho por mí", relata Terence.

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(Photo: Garry F McHarg/Daily Record)

(Photo: Garry F McHarg/Daily Record)[/caption]

Así Teven se ha mantenido limpio durante 18 meses, los cuales al principio el mismo reconoce que "nunca hubiese considerado el yoga, pero trataría lo que sea para ayudarme a recupérame. Estoy tan agradecido de haberlo hecho".

Incluso su instructora de yoga, Lou Prendergast, declaró que el cambio en Terence ha sido impactante. "Era una persona que era muy cerrado, cerrando a todo el mundo, entonces sus ojos comenzaron a abrirse, su piel mejoró, su postura mejoró y su personalidad volvió".