Mauricio Pinilla tiene todo acordado para volver a Universidad de Chile. De hecho, ya se practicó los respectivos exámenes médicos en la clínica Las Condes, una prueba más de que su retorno al club que lo formó es virtualmente un hecho. Eso sí, al volver a Italia, el atacante apeló a la estrategia: mantuvo su fichaje en suspenso para no incomodar al Genoa, el actual propietario de su pase, del que buscará salir como jugador libre.

El ariete debe presentarse mañana en el club peninsular. Un trámite que, en rigor, cumplirá. Sin embargo, su presencia apunta a otro objetivo: conseguir su liberación, considerando que le resta un año de contrato. "No he tenido indicación de que no vayan a contar conmigo. En base a eso, manejaremos las posibilidades. Manejaré mi futuro de acuerdo a cualquier novedad que me hagan saber", puntualizó.

Eso sí, reconoció que le agrada la idea de jugar en la U. "La ilusión ha estado siempre", concluyó.