Durante sus primeros meses al mando de Universidad de Chile, ha quedado claro que el estilo de juego de Darío Franco es totalmente distinto al que mostraban los azules con Jorge Sampaoli.

La pérdida del vértigo ofensivo y el cambio de esquema son parte de las diferencias que hay entre ambos procesos. Sin embargo, hay otro detalle que marca esta disimilitud: la eficacia frente al arco rival.

Y es que con el actual entrenador de la Selección, durante las tres primeras fechas de cada torneo nacional que disputó, Universidad de Chile mostraba un gran porcentaje de conversión.

En los torneos de Apertura y Clausura 2011, los primeros del casildense como DT de la "U", su escuadra anotó ocho y siete goles, respectivamente. El año pasado, en tanto, los números fueron similares: siete anotaciones en el Apertura y ocho en el Clausura.

En cambio, con Franco a la cabeza, los números ofensivos no están ni cerca, pues han anotado sólo dos goles en tres fechas disputadas, considerando que el miércoles a las 19 horas recuperan el duelo suspendido contra Santiago Wanderers.

Este ha sido el principal dolor de cabeza del técnico cordobés, quien no ha encontrado solución a la falta de finiquito de sus delanteros, problema que los tiene inmersos en el peor arranque goleador del club desde el Apertura 2007, cuando eran dirigidos por Salvador Capitano. Esa vez anotaron sólo un gol en los primeros tres encuentros.

Ausencia de un goleador

El no contar con un especialista en el puesto de centrodelantero también le ha pasado la cuenta al equipo. Sin embargo, el entrenador no lo siente así. "No nos ha pesado la falta de un '9'. El problema es que no llegamos con demasiada gente o de repente no nos generamos las chances", expresó.

Para el juego de hoy ante San Marcos de Arica en el estadio Santa Laura, la principal novedad será el ingreso de Ramón Fernández por Guillermo Marino.