La Federación de Fútbol de Ucrania (FFU) ofreció un cargo ejecutivo al futbolista Roman Zozulya, quien ha vivido una pesadilla en España. El último día del cierre del libro de pases, el jugador fue transferido vía préstamo desde el Real Betis al Rayo Vallecano, en la Segunda División de la liga española. La facción antifascista de este equipo, los reconocidos Bukaneros, lograron que la estadía de Zozulya en el Rayo durara tan sólo 15 horas (Ver Zozulya, el futbolista cortado por su ideología).
Ante la imposibilidad de jugar durante esta temporada, por haber estado inscrito en tes equipos durante este lapso, el presidente de la Federación de Ucrania, Pável Pavelko, ofrecerá un cargo ejecutivo al jugador, por ser un ejemplo de patriotismo y actitud cívica. "Todas sus acciones estaban destinadas a beneficiar a la sociedad ucraniana, por lo que recomendaré a Zozulya al comité ejecutivo de la FFU. Creo que su candidatura será apoyada unánimemente en el congreso de abril", dijo Pavelko a la prensa local.
"Estamos convencidos de que un futbolista, que además es un patriota, no debe sufrir por su postura cívica. La actividad no futbolística de Román es un motivo de orgullo nacional", dijo el presidente, y agregó que el internacional ucraniano mostró una muy activa postura cívica como cuando " "fundó un fondo de ayuda a los militares que defienden a su país en el este de Ucrania". "Además, ayudó con su dinero a reconstruir un hospital en Dnipró donde transcurre la rehabilitación de los soldados heridos del Ejército ucraniano", añadió.
A pesar de todo el revuelo que se dio en España por la postura política de Zozulya, ante el contexto del conflicto que mantiene su país con Rusia, Pavelko se mostró conforme con el actuar de las federaciones involucradas: "Estoy satisfecho de destacar que tanto la Federación Española de Fútbol como la FIFA comparten nuestra preocupación al respecto y entienden lo absurdo de la situación creada".