Millones de pesos en impuestos se habría ahorra el ex Presidente Sebastián Piñera a través de su empresa Inversiones Bancard Limitada, entre la década de los 90' y el 2004.
Según un reportaje publicado por CIPER, en aquella época exitosas empresas chilenas declararon ante el SII grandes pérdidas sin estar en crisis. La fórmula consistía en comprar firmas quebradas y usar sus pérdidas para borrar utilidades y ahorrar impuestos.
De acuerdo a la información recabada por el medio de comunicación, el ex jefe de Estado compró firmas de Manuel Cruzat que estuvieron años sin actividad y una de ellas la usó para que Inversiones Bancard Ltda. declarara pérdidas por $44 mil millones.
Además de la empresa ligada al ex mandatario, otras 20 grandes firmas chilenas utilizaron este mecanismo, entre las que figuran Empresas Penta S.A. de Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano; Inversiones San Patricio S.A. e Inversiones Quitalmahue S.A., ambas vinculadas a los controladores de Falabella; e Inversora Costa Verde Limitada, que pertenecía a la familia Cueto, controladora de Latam.
"Las pérdidas que informaron esa veintena de empresas eran de tal magnitud que parecían el resultado de una profunda crisis económica. Por ejemplo, Inversiones Bancard Ltda., declaró una pérdida tributaria de $44 mil millones; San Patricio, $940 mil millones; Penta, $54 mil millones. Pero no había crisis. Lo que había, según la definición de un ex alto funcionario del SII, era 'un duro y masivo ataque de las empresas contra las arcas fiscales'", señala el texto.