Ayer, en el Centro Deportivo Azul, todos esperaban a Gastón Fernández. Las palabras de su representante en el mercado brasileño, Sergio Bassi, golpearon a sus compañeros, dirigentes e hinchas del club. "Se habló con el jugador, y éste se quiere ir, quiere venir a Gremio", dijo su agente, luego de confirmar que el cuadro de Porto Alegre ofreció US$ 570 mil por su pase, además, de un contrato por las próximas tres temporadas. Su sueldo será cercano a los US$ 80 mil mensuales.
Sin embargo, las explicaciones nunca llegaron. Por lo menos, hasta ayer. La Gata extendió sus días en Buenos Aires siendo, nuevamente, justificado por el club: "Gastón pidió permiso hasta mañana (hoy) en la mañana. Debe sumarse a los entrenamientos", aseguraron desde la institución. De paso, según revelan desde Azul Azul, hasta ayer en la tarde, no habían recibido ninguna oferta formal por el futbolista. Sin embargo, al mismo tiempo, reconocen que su continuidad en el equipo que entrena en La Cisterna es cada vez más incierta.
Más aún cuando el propio jugador aseguró, en conversación con Globoesporte, que existía una posibilidad de recalar en Gremio, pero que prefería no referirse al tema. Más tarde, el presidente del cuadro brasilero, Romildo Bozan, lo confirmó: "Es una posibilidad de negocio para nosotros, pero no hay nada cerrado. Queremos avanzar en las negociaciones y definirlo este fin de semana para inscribirlo en la Libertadores".
La Gata se escapa de todo. De las críticas, de la pifiadera de los hinchas, y de la oportunidad de revertir su mal momento en la U. A algunos dirigentes no les gustó su ausencia a las práctica, ya que sienta un mal precedente para el resto del plantel que lucha por un puesto de titular.
Lo cierto es que, independientemente de que Fernández siga en el club, el transandino viene preparando su salida de La Cisterna hace un par de semanas. Luego del apriete que sufrió por tres hinchas del club, el ex Estudiantes de La Plata desató en furia. Según revelan sus cercanos, aquel día se acercó a su representante para pedirle que negociara su desvinculación del equipo que conduce Guillermo Hoyos. La respuesta de Azul Azul fue negativa: "Gastón quiso salir, pero no se lo permitimos. El club que lo quiera, debe pagar lo que corresponde", dice un director de la concesionaria.
Lo cierto es que el interés de Fernández estaba en retornar a Estudiantes de La Plata, club en el que ostenta su cartel de ídolo. El 10 azul logró llegar a un acuerdo con el equipo que conduce Nelson Vivas, pero finalmente la falta de cupos cerró su opción de partir.
En el Centro Deportivo Azul, ayer, Gonzalo Jara aseguró que las críticas no le afectan a Fernández. Lo ven como un líder positivo y no quieren que parta del club.
"El momento del equipo del campeonato pasado le pasó la cuenta a Gastón en el sentido que se le achacaron cosas que no iban de la mano de él. El rendimiento del equipo fue el más afectado por dichos de una persona que se expresó de mala manera, pero con Gastón sabemos la calidad de jugador que es", dijo en una indirecta a las palabras de Víctor Hugo Castañeda tras el último clásico con Colo Colo.
De paso, el defensor aseguró: "la crítica hacia él ha sido excesiva, lo critican de una manera que no corresponde, el campeonato pasado fue uno de los que más goles hizo en el equipo (...) como en algún momento esperan más de mí, quizás esperan más de él".