Aunque Chile aporta sólo 0,2% de las emisiones de CO2 del mundo, nuestro país se comprometió ante la ONU a reducir los gases de efecto invernadero (GEI), causantes del calentamiento global en 20% para 2020.

En busca de ese objetivo, el programa MAPS-Chile -que  incluye a seis ministerios y que lidera Medio Ambiente-  entregó ayer las primeras proyecciones de las emisiones de CO2 del país para 2020 y 2030 y cómo aportarán a ellas siete sectores productivos del país.

Para hacer el cálculo, los expertos tomaron como línea base el total de las emisiones contaminantes que emitió el país en 2007. Con ese dato, proyectaron que Chile producirá entre 124 a 180 millones de toneladas anuales de CO2 para 2020, lo que dependerá del crecimiento económico. El triple de lo que emitía el país en 2006 (60 millones de toneladas).

La meta es restarle a ese total un 20%, que los expertos calculan entre 25 y 35 millones de toneladas. Algo similar al doble de la emisión total de lo que las centrales a carbón, gas y diésel generaron en 2011.

EL FACTOR ENERGIA

De los siete sectores analizados, los que más aportarán con CO2 son la generación eléctrica, minería y otras industrias y transporte. Sin embargo, la primera es la que muestra una mayor alza.

De hecho, si en 2006 la generación eléctrica representaba el 26% de todo el CO2 que emitía el país, para 2020 será entre el 36% y 40%, y para 2030 el 41% a 48%. La minería, en tanto, representaba en 2006 el 24% del CO2 total del país y para 2020 será el 22%.

Rodrigo Palma, líder de la investigación y director del Centro de Energía de la U. de Chile, explica que el crecimiento del sector eléctrico está relacionado con la carbonización de la matriz energética y también con el aumento del uso de electricidad por parte de los otros sectores.

Una tesis que comparte Marcelo Mena, docente de Ingeniería Ambiental de la Unab y miembro de Maps, quien dice que esos sectores son la minería y comercio público que "delegan" parte importe de su aporte de CO2 a la generación eléctrica. "Aparte de las mineras (que demandarán cada vez más energía), están los centros comerciales que hoy representan 7%, pero que cada vez están siendo más grandes y con mayor consumo".

El desafío será  definir bien cómo responder a esa demanda sin afectar al medio ambiente.

Por otro lado, sectores como el forestal muestran saldo a favor, porque aun cuando contaminan en las faenas y en el transporte, lo que emiten es menor que lo que el bosque captura en CO2. Pero eso tiene un tope y la baja regeneración de los bosque explica por qué el margen positivo también se estrecha para 2020.

MEDIDAS DE MITIGACION

Con los datos por sector en la mano, la idea es elaborar un plan de mitigación de emisiones contaminantes para lograr reducir en 20% las toneladas de CO2 que emita Chile a la atmósfera. 

Palma adelanta que dentro del paquete de 127 medidas, que se darán a conocer el próximo año como parte de la fase 2 de esta investigación, está la transferencia energética y cambios en las normas de las maquinarias que ingresan al país, entre otras cosas. "El sector minero, por ejemplo, puede introducir más eficiencia energética en sus procesos. En otros procesos de producción del país se puede introducir energías renovables y combustibles de baja emisión", menciona Palma.

El gobierno también pidió a Maps-Chile reestudiar energía nuclear, energía renovable hidráulica y una matriz energética con el 20% de energías renovables no convencionales.

Mena, en tanto, quien trabaja en las medidas de mitigación para transporte y sector público dice que las conductas sustentables también importan. "Es impresionante la plata que te ahorras con ellas. Desde cambiar la ducha a metas de rendimiento. La idea es mostrar que con conductas de ahorro no sólo tendremos una mejor calidad de vida, sino que además estaremos reduciendo las emisiones", dice.