Ayer en la tarde, el agente chileno ante La Haya, Felipe Bulnes, le solicitó a su secretaria que se comunicara telefónicamente con la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara.

El objetivo era confirmar que asistirá a la sesión de hoy para explicar las declaraciones que había formulado el domingo pasado. En una entrevista con Reportajes de La Tercera, el ex ministro manifestó estar "profundamente preocupado" por el debate público en torno a la posibilidad de pedir la incompetencia de la Corte Internacional de Justicia respecto de la demanda marítima de Bolivia. Esto, junto con acusar un intento por "pautear" al gobierno y calificar como una "irresponsabilidad" y "demagogia" la actitud de los parlamentarios y las diversas personalidades públicas que han pedido concretar esa acción antes del 15 de julio (en las denominadas "excepciones preliminares") y no en febrero, cuando se deba presentar la contramemoria.

La exposición del ex ministro en Valparaíso -fijada para las 15.30 horas- responde a una citación enviada por e-mail ayer en la mañana, a iniciativa del presidente de la comisión, Jorge Tarud (PPD). El diputado insistió ayer en rechazar las declaraciones de Bulnes. "El ha injuriado a tres ex presidentes de la República: a Sebastián Piñera, Eduardo Frei y Ricardo Lagos", dijo, en alusión a los comentarios que han emitido los ex mandatarios sobre el tema, junto con señalar que "le estamos dando una oportunidad al agente para que explique sus opiniones".

En la misma línea, desde la Alianza criticaron la postura de Bulnes, al igual que en algunos sectores del oficialismo.

Quienes han participado de las distintas reuniones en las que se ha abordado la demanda boliviana cuestionan la postura del agente y señalan que en la discusión pública sobre la posibilidad de pedir la incompetencia del tribunal internacional ha participado el propio canciller Heraldo Muñoz. A principios de junio, el titular de RR.EE. dijo en TVN que "estamos muy cerca de impugnar la competencia de la corte", y agregó, esa vez, que "esa es la clara tendencia de todas las opiniones que hemos escuchado y las opiniones que nos hemos formado, pero la decisión será de la Presidenta".

Pese a ello, el ministro -que no estaba enterado con antelación de lo que diría Bulnes- salió ayer a respaldar la postura adoptada por el agente chileno.

Desde Washington, Muñoz dijo que "en estos temas que tienen que ver con la política exterior de nuestro país (...) hay que tener mucha prudencia". Y agregó, evidenciando una preocupación por el debate político que existe sobre el tema, que "lo que importa no es agregar fuego a una polémica, sino que estar todos juntos detrás de la Presidenta cuando ella tome la decisión de si impugnar o no la competencia de la corte, y cuándo hacerlo".

En el gobierno hay quienes temen que tras la fuerte presión que ha existido, los distintos sectores políticos exijan explicaciones a La Moneda por las razones que influyeron en la decisión. Esto, en el caso que la Presidenta Michelle Bachelet opte por no pedir la incompetencia antes del 15 de julio, opción por la que se estarían inclinando en el equipo jurídico chileno.

En algunas de las exposiciones ante los diputados y senadores de las comisiones de RR.EE., el canciller y Bulnes han comentado algunos riesgos de impugnar ahora a La Haya.

En ese marco, Muñoz sostuvo que "en una democracia hay perfecto derecho de aquellos que conocen la materia de pronunciarse, pero tiene que hacerse de manera prudente, de modo de no afectar los intereses del país". Y señaló que "aquí lo que se trata de defender es una política de Estado, donde no hay diferencias entre el gobierno y la oposición".

También defendió ayer a Bulnes el ex canciller Mariano Fernández, quien dijo que sus dichos "responden a la prudencia de un agente que es responsable de defender los intereses de Chile en un juicio".