El viernes falleció a los 100 años Erich Priebke en Roma, donde cumplía condena de reclusión domiciliara parcial tras participar en la matanza de 335 romanos en 1944 cuanto era capitán del ejército nazi, en la Segunda Guerra Mundial.
El ex militar nazi nunca ofreció perdón por sus crímenes, por el contrario, durante todo el juicio se limitó a señalar que cumplía órdenes, una actitud que le ganó la mayor antipatía de numerosas asociaciones de Derechos Humanos en la capital italiana.
Pero la polémica que rodeó a Priebke no terminó con su muerte. Apenas se conoció el deceso del ex capitán nazi, la autoridades romanas solicitaron no enterrar al alemán en tierra italiana y descartaron cualquier acto público relacionado con su funeral. Después que el turno del Vaticano, que desestimó que cualquier iglesia católica se prestara para realizar una ceremonia fúnebre.
En ese escenario, el abogado del nazi, Paolo Giachini, inició las gestiones para trasladar el cuerpo a Argentina, para que fuera sepultado en Bariloche, ciudad donde vivió en el anonimato Priebke y donde se encuentra enterrada su esposa. Pero ahora fue el turno del gobierno transandino de dar con la puerta en las narices a la defensa del militar.
Ante las demandas de las mismas autoridades italianas, surgió la posibilidad de trasladar el cuerpo a Alemania, puntualmente a la ciudad donde nació el capitán nazi: Hennigsdorf. Pero la administración de la ciudad germana se apresuró en señalar que el cementerio de la localidad sólo admite entierros de habitantes de la ciudad y a sus familiares.
Después de todos estos rechazos y mientras el cuerpo de Priebke se mantiene en la morgue del hospital romano Gemelli, el abogado Giachini cambió de estrategia y optó por el secretismo. Según pública Corriere della Sera, el profesional afirmó que "mañana o posiblemente hoy en la noche) se realizará en privado para no ofender a nadie". Sobre la ceremonia, Giachini explicó que se buscará una iglesia protestante que permita un ritual católico. Sobre la sepultura, afirmó que "no será en Roma".