El domingo Santiago y varias ciudades del país fueron testigos de masivas marchas contra el actual sistema de pensiones. Agrupados bajo el lema "No + AFP", miles de personas marcharon por las calles exigiendo el retorno del antiguo sistema de reparto previo a 1981.
Esta manifestación, que según los organizadores, convocó en Santiago a más de 150 mil personas, demostró que el malestar contra las AFP viene gestándose desde varios años. Teniendo como punto de inflexión el 2013 cuando un informe de la Superintendencia de Pensiones reveló que, a 30 años del inicio del sistema, el promedio nacional de las jubilaciones era de $ 179 mil.
Ese año, y como una forma de canalizar fuerzas, distintos gremios de todo el país, como la Confederación Nacional de Trabajadores de la Salud Municipal (Confusam), la Confederación de Trabajadores Metalúrgicos (Constramet), entre otras, se reunieron en Valdivia y acordaron crear la Coordinadora Nacional No + AFP -convocantes de la marcha del domingo pasado-, dando el puntapié inicial al movimiento.
"Esta es una organización de hecho, cuyo único objetivo es luchar por un sistema previsional distinto", explica Luis Mesina, vocero de la coordinadora y miembro de la Confederación de Sindicatos Bancarios y Afines.
El factor Myriam Olate
Para los convocantes, una de las razones del éxito de la manifestación fue la polémica pensión recibida por Myriam Olate, ex esposa del diputado Osvaldo Andrade. "Eso generó una indignación tal que la gente consideró indispensable dar a conocer la molestia y la rabia en las calles", sostiene Esteban Maturana, presidente de la Confusam y uno de los dirigentes que ha participado desde la génesis del movimiento en 2013.
Otra de los fundadores fue Horacio Fuentes, coordinador nacional del Comando Contra las AFP, que señala que "nadie puede arrogarse el éxito de la convocatoria, pues todos hemos aportado con un granito de arena". Añade que actualmente están alejados de la primera linea "por discusiones internas", pero que siguen apoyando el tema de fondo.
Tras el éxito de la marcha, el plan es lograr que "las autoridades nos escuchen y se sienten a conversar sobre el sistema" agrega Mesina.b