Dividida Alemania en dos: Berlín Oeste de la República Federal de Alemania (RFA), y Berlín del Este, que pertenecía a la República Democrática de Alemania (RDA). Durante la madrugada del 13 de agosto de 1961, miles de soldados levantaron un muro, entre otras cosas, para detener la inmensa cantidad de alemanes de la RDA que querían huir de la ciudad comunista y para evitar que "elementos fascistas" llegarán hasta el Bloque del Este.
Entre 40 y 55 mil trabajadores y policías participaron en la construcción de 155 kilómetros de paneles de hormigón, ladrillos y rollos de alambre de púas que separaría a la ciudad del Berlín comunista, del Berlín capitalista.
Tras su construcción fueron miles de alemanes los que arriesgaron su vida por huir de la República Demócrata de Alemania. 309 torres de vigilancia con expertos francotiradores vigilando día y noche; potentes reflectores que iluminaban durante la noche; patrullaje militar, se encargarían de que ningún hombre pasara el muro hacia el Berlín capitalista.
El que se tomara la valentía de cruzar luego de superar esos dos metros de cemento, se encontraría con una valla de metal electrificada, luego una franja de seguridad con picas de acero, una torre patrullada a menudo con perros, seguido de desniveles y zanjas para que no se pudiera huir en automóvil, finalmente un muro exterior entre tres y cuatro metros de alto.
Los primeros intentos de traspasar este muro fueron las personas que saltaban desde las ventanas de las casas que se encontraban cerca del muro, para poder superarla. "Entre 1961 y 1988, más de 100 mil ciudadanos de la RDA intentaron huir a través de la frontera interalemana o el Muro de Berlín. Más de 600 personas fueron abatidas a tiros por soldados fronterizos de la RDA o murieron de otra forma al intentar huir. Algunos de ellos murieron ahogados, sufrieron accidentes mortales o se suicidaron al ser descubiertos", relata la Oficina de Turismo de Berlín.
La orden ante los intentos de fuga de los muchos que intentaron superar al muro fue "tirar a matar".
Las extremas formas de traspasar el muro con vida eran algunas impensadas: Un hombre le quitó el parabrisas a su convertible y pasó debajo de una de las barreras con su madre oculta en el maletero, detalla Infobae.
O un maquinista que en diciembre del 61, logró evadir las barreras de control acelerando a fondo y llegar hasta el otro lado con sus 30 pasajeros. "¡Este es el tren de la libertad!", gritó mientras conducía a toda velocidad.
La gente cavaba túneles para pasar por debajo del muro, fabricaban globos aerostáticos de aire caliente con sábanas viejas, o volaban por encima del muro en aviones ultraligeros.
A pesar de que muchos de ellos no lograron, 40 mil personas huyeron de Berlín Oriental.
Escapaban del espionaje, la persecución, los atrasos tecnológicos, el castigo contra toda manifestación intelectual que fuera considerada "disidente", relata El Mundo.