Durante un tramo importante de los 24 años que lleva al aire, Buenos días a todos fue el único líder de las mañanas. Era un emblema del horario: prácticamente no había ningún canal que le hiciera el peso en sintonía. Sin embargo, en 2011 el escenario empezó a variar.
Canal 13, luego de varios proyectos sin mayores resultados, apostó en Bienvenidos por dos rostros de experiencia en la mañana, Tonka Tomicic y Martín Cárcamo, y comenzó a quitarle terreno a lo que parecía una institución casi invencible. De hecho, en 2013 se convirtió en el matinal más visto, con 6,5 puntos, superando de manera estrecha a Buenos Días... (6,4).
El escenario no solo timbró un giro en el liderazgo de las mañanas; también configuró un nuevo frente en el que la batalla por la sintonía estaba mucho más abierta y sin vencedores fijos, panorama que se ha intensificado durante 2014, con una fluctuación que ha tenido a casi todos los matinales como líderes en un punto de esta temporada (ver fichas).
"Qué bueno si somos primeros, pero tampoco es malo salir segundos. Como equipo estamos primando los contenidos, porque no todo es rating. Nosotros dimos un giro al servicio público y sabíamos que eso tendría sus costos, porque la gente está acostumbrada a ver otras cosas en la mañana. Además, sacamos los comentarios de farándula y los opinólogos", afirma Mauricio Correa, director de Buenos días a todos. El espacio que animan Julián Elfenbein y Karen Doggenweiler gana en lo que va del año con 6,1 unidades de sintonía, pero -confirmando la oscilación del horario-, es seguido muy de cerca por Bienvenidos, que marca 6.
Por su parte, Mega y Chilevisión también han disfrutado de las posiciones de avanzada. En abril, La mañana de Chilevisión compartió con Buenos días a todos el primer lugar, con 6,3 puntos. Según la editora general del espacio del grupo Turner, Tania Aguilar, el repunte se debió a un ejercicio puntual: centrarse en los conflictos ciudadanos y domésticos. De hecho, el programa abrió un teléfono y un mail para que cualquiera pueda llamar contando algún caso, los que van desde problemas con vecinos hasta situaciones puntuales en colegios. "La fortaleza de nuestro programa está en que le damos un tratamiento distinto a la contingencia", sentencia Aguilar.
Pero, en este mes, el que más cuentas alegres ha sacado es Mucho gusto de Mega, al distanciarse de su competencia con 7,4 puntos de rating, y marcando peaks de 13,8 unidades (1 de mayo), cifras poco habituales en esa franja.
Este mes, la audiencia ha preferido el trío que conforman Katherine Salosny, Luis Jara e Ivette Vergara. La fórmula está -según Jorge Banderas, su productor ejecutivo- en la apuesta por créditos ampliamente conocidos. "La Katty y Lucho son rostros consolidados y no tienen nada que demostrar en pantalla. Ellos son como son", describe el ejecutivo.
Eso sí, en Mega son cautos y saben que el primer lugar solo puede apuntar a aspectos coyunturales, tal como ha sucedido en la industria televisiva del último año. "Lo principal es no pecar de soberbios. Esto va y viene así que lo tomamos con mesura", asegura Banderas. Luis Jara, por su parte, coincide: "Celebramos el día a día, porque no sabemos qué pasará mañana ni en el largo plazo. No podemos ocultar que estamos contentos, pero lo tomamos con toda la humildad del mundo".
Sabiendo que el escenario está cada vez más competitivo, Bienvenidos se vale de sus secciones emblemáticas para dar la batalla. En tal caso, su estrategia es evidente: tratar historias de corte sentimental o familiar a través de recreaciones y apelar a secciones que guardan relación con el tarot, como la liderada por Pedro Engel. "Muchas veces tratamos de innovar según la intuición, pero estas dos secciones la gente las pide porque se ha creado un lazo con la audiencia", cuenta Pablo Manríquez, director del programa.
En esta carrera, también surge un quinto competidor: La Red, señal que tiene una oferta doble, ya que a esa hora emite Mujeres primero (de 8 a 10) y Mañaneros (de 10 a 12). Pese a que están lejos de los puestos de liderazgo, su opción va por otra ruta: contraprogramar con una oferta que no necesariamente toca el contenido habitual del horario (la contingencia y los conflictos ciudadanos). "Ganar no nos quita el sueño, porque buscamos generar más contenidos que le importen a la gente", explica Ingrid Garcés, subgerenta de Contenidos de La Red.
Matinales similares
Sergio Godoy, profesor en la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica, analiza la reñida batalla por el rating matinal, y cree que el inestable rating de los espacios matutinos se explica en parte con la similitud que existe entre la televisión y la radio. "La música está de fondo en la vida de las personas y lo mismo está ocurriendo ahora con la TV. Puede estar prendida mientras hacemos otras cosas, nos acompaña, pero no estamos muy concentrados en ella", sostiene.
También hay otro factor clave: aunque los matinales que han logrado acercar sintonía con Buenos Días..., partieron con secciones que marcaban cierta diferencia, posteriormente los programas se han estandarizado y siguen todos un libreto similar. Según Godoy, ante la escasa diferencia de la oferta, el público no necesariamente se centra en un solo. Finalmente, el académico apunta al espacio de TVN y cuenta que todo programa llega a un techo de consumo: alcanza su liderazgo pleno para luego cambiar y darle terreno a otros.