La Justicia colombiana condenó hoy a 10 años de prisión al pirata informático Andrés Sepúlveda, quien aceptó varios delitos entre ellos espiar el proceso de paz que el Gobierno y las FARC adelantan en la Habana y que ya había acordado esa pena con la Fiscalía a cambio de su colaboración.
Sepúlveda fue considerado culpable de cinco delitos, entre ellos los de interceptaciones ilegales y espionaje, según se desprende de la sentencia del Juzgado 22 de Conocimiento de Bogotá.
Asimismo, tendrá que pagar una multa de 120 salarios mínimos mensuales vigentes como parte del acuerdo.
El pirata informático fue detenido en mayo de 2014 tras ser relacionado con oficinas clandestinas que hacían interceptaciones ilegales, entre ellas una que tenía como objetivo sabotear el proceso de paz.
Unos meses antes había sido contratado por la campaña del entonces candidato a la Presidencia de Colombia Óscar Iván Zuluaga, del partido Centro Democrático, liderado por el expresidente y ahora senador Álvaro Uribe.
Antes de la sentencia, Sepúlveda leyó un comunicado en el que aseguró que no ofrece disculpas a las FARC, pero sí a las Fuerzas Militares y de Policía de Colombia.
"Lamento profundamente el daño que les causé. Lamento cada día el (daño causado a su) buen nombre y el honor de ellos", destacó.
También pidió perdón a "todas las personas que han participado en el proceso investigativo", a los fiscales, policía judicial, abogados y jueces.
Sepúlveda interceptó comunicaciones de negociadores de las FARC, del máximo líder de esa guerrilla, Rodrigo Londoño, alias "Timochenko", y de la exsenadora liberal Piedad Córdoba, entre otros.