El volumen de mensajes no deseados se ha reducido de forma constante desde agosto, pero el periodo navideño atestiguó un declive aún más profundo.
Una empresa de seguridad detectó que cada día se enviaron 200.000 millones de mensajes basura en agosto, pero sólo 50.000 millones en diciembre.
Aunque las razones de dicha caída aún son desconocidas, quienes observan el fenómeno aseguran que la reducción podría ser temporaria.
Cerca de las vacaciones navideñas, tres de los productores más grandes de spam disminuyeron su actividad, le dijo a la BBC Paul Wood, analista de la empresa de seguridad informática Symantec.
"Pero es difícil explicar por qué", aseguró.
BOTNETS DORMIDAS
La amplía mayoría de correo basura se envía a través de redes de computadoras infectadas con virus, conocidas como botnets.
Una de esas redes, llamada Rustock, fue en su momento responsable de hasta el 48% de mensajes no deseados que se enviaron en el mundo, afirmó Wood.
Pero en diciembre Rustock fue responsable únicamente del 0,5% del spam mundial.
Al mismo tiempo, otras dos botnet, Lethic y Xarvester, también se fueron a "dormir".
En el pasado ya ha habido caídas en los niveles de actividad de estas redes.
"Usualmente esto se asocia a que la botnet se deshabilita. Pero hasta donde sabemos, Rustock está intacta", añadió Wood.
NUEVA ESTRATEGIA
Una de las razones para explicar lo ocurrido puede ser que los spammers simplemente se estén reagrupando para lanzar una nueva campaña.
La motivación de quienes están detrás del correo basura es la ganancia económica, dijo Karl Leonard, un investigador de la empresa de seguridad Websense.
"Si una campaña no genera los ingresos que esperan, se detienen, reagrupan e intentan algo nuevo", añadió.
Las campañas anti-spam, además, han logrado éxitos recientes que dificultan la vida de quienes envían correos basura.
Vincen Hanna, del grupo contra el correo basura Spamhaus, recuerda que en septiembre del año pasado un grupo de mensajes no deseados, Spamit, anunció su cierre tras una serie de problemas en su operación.
Según Leonard, también existe la posibilidad de que estos grupos estén desviando su atención hacia Facebook y Twitter.