José Muñoz (70) ha vivido en estas tierras por más de 40 años y a pesar de haber tenido durante décadas una gran cercanía a la cultura Mapuche, no habla el mapudungún. Aun así, tras escuchar a la soprano Esperanza Restucci cantar en esa lengia, aseguraba que era "extraordinario lo que expresaba en el canto". Expresaba una conexión con la naturaleza, que quizás sintieron varios de los asistentes que durante la noche del lunes llegaron al lago Lanalhue, ubicado en comuna de Cañete, en la VIII Región. Fue el escenario elegido por el equipo de Gritos del bosque, nueva película del director Jorge Olguín, para lanzar el videoclip del tema central de la cinta.
Un lugar desbordante de misticismo, al cual se accede a través de un camino que corta por medio de un imponente bosque, sector cercano a donde se filmaron varias escenas de Gritos del bosque, que ostenta ser la primera cinta en 3D del cine chileno. Con ese escenario de fondo se presentó la cantante chilena, quien además de ser la protagonista del clip, compuso el tema, que se llama igual que la cinta.
"La letra la saqué directamente de una parte del guión y la música la hice yo. Para cantarlo tomé una clase con una señora que hablaba en lengua nativa, ella me ayudó con la fonética para que pronunciara bien", comentó Restucci.
Tras la presentación, enmarcada dentro del Festival de Cine de Lebu, Olguín (Angel negro, Sangre eterna) destacó que los bosques de la zona de Arauco "literalmente" son un protagonista más. "Junto a Carolina García (guionista), luego de trabajar en Caleuche, seguimos investigando y viniendo al festival, y descubrimos parte de la cosmovisión mapuche. Ella tuvo acceso a descubrir ciertas historias y conceptos que los transformamos en una película", dice el director.
Además del cerca de centenar de personas oriundas del sector que llegaron a la presentación de Restucci, también asistieron Fernanda Urrejola, Paulo Brunetti y Tiago Correa, protagonistas de la película, y las productoras Francisca Cifuentes y Soledad Saieh. Esta última analizó los desafíos que conllevó realizar Gritos del bosque: "Lo más complicado fue la posproducción, ya que cómo es 3D se trabaja con muchas capas de película y a dos ojos, no a uno, que es lo que hace el cine tradicional. Y quizás más importante fue la construcción de un guión que, más allá de establecer una postura frente al conflicto Mapuche, debía reflejar su mitología como una forma de reconocimiento", precisó.