La próxima semana se juega el Chile Classic, el torneo más importante en el país, y todos quieren disputarlo, aunque los cupos son muy limitados.

La mayoría del field lo ocupan los miembros del Web.com Tour, entre ellos, los chilenos Benjamín Alvarado y Hugo León. La organización del certamen tiene derecho a sólo ocho invitaciones y cuatro de ellas no las entrega a su gusto, sino que a través de un ranking clasificatorio que cuenta los últimos cinco torneos del verano. 

Este escalafón genera malestar entre los golfistas nacionales, pues se enteraron de que si León finaliza entre los cuatro primeros su cupo no "correrá" al quinto ubicado.

El presidente de la JPGA, la asociación que agrupa a los profesionales chilenos, dice que "entendemos que el dueño del evento es Alejandro Peric y él puede invitar a quien quiera, pero lo que molesta, lo que encontramos extraño, es que se diga que la qualy da cuatro cupos y la lista no corra. Así es siempre en el golf".

La preocupación de Valdés es que ese cupo se lo den a un foráneo. "Lo más importante es que sea para los chilenos. Con lo que cuesta que haya este tipo de torneos en Chile y ya le dieron un wild card a un extranjero (Shaun Micheel). En Colombia tratan de meter a la mayor cantidad de locales posible, lo mismo en Argentina. Esto pasa sólo en Chile".

El quinto torneo, el que cierra la clasificatoria al Chile Classic es el Abierto de La Posada, en Concepción, que partió ayer. El torneo lo está jugando Mark Tullo, quien viajó el martes desde Sudáfrica para disputar el certamen.