Pablo Guede no está tranquilo en la Cuarta Región, donde Colo Colo realiza la pretemporada. La molestia partió hace dos días, cuando por el desperfecto que sufrió el bus que movía al plantel hacia el campo de entrenamiento, el traslado debió realizarse en taxis. Unos diez vehículos fueron necesarios para mover al equipo y a sus colaboradores.

No es el único factor que inquieta al estratega. De hecho, el principal ha sido el mal estado de las canchas en las que ha debido realizar la preparación futbolística, que alterna con las cargas de trabajo físicas a las que es sometido el equipo de Macul para soportar en óptimas condiciones la próxima temporada. Mañana, de hecho, los albos se trasladarán a un nuevo complejo en busca de mejores condiciones. Ni siquiera el campo de juego del estadio Francisco Sánchez Rumoroso presentaba las características que requería el estratega, principalmente por el temporal que afectó a la zona hace algunos días.

Hay más. En el norte, Guede extraña la presencia de un directivo. El presidente, Aníbal Mosa, no pudo acompañar al equipo y el gerente deportivo, Óscar Meneses, está de vacaciones. En ese contexto, uno de sus interlocutores ha sido Fernando Monsalve, presidente del Club Social y Deportivo Colo Colo, quien está de vacaciones en la región y ha aprovechado de acompañar al grupo y de dialogar con el director técnico.

El Cacique se medirá el 5 de julio con Coquimbo Unido, en el Francisco Sánchez Rumoroso. Cuatro días después se enfrentará con La Serena, por la Copa Chile.