Veinticuatro horas después de que el ex Presidente y abanderado de Chile Vamos, Sebastián Piñera, acusara "debilidad" del gobierno por retirar el carácter de terrorista de las querellas contra un grupo de comuneros mapuches en huelga de hambre y de que -por ese motivo- la oposición anunciara una acusación constitucional en contra del ministro del Interior, Mario Fernández, el Ejecutivo salió a enfrentar con fuerza al ex mandatario.

En una actividad en Santiago Centro y acompañada del ministro de Desarrollo Social, Marcos Barraza -quien el fin de semana dijo que "en La Araucanía no hay terrorismo"-, la vocera de gobierno, Paula Narváez, calificó de "desconcertantes" los dichos de Piñera, acusando al ex presidente de "desinformar" a la ciudadanía y "no hacerse cargo de lo que ocurrió en su propio gobierno, cuando tuvo que actuar de manera muy similar".

La ministra secretaria general de gobierno hacía referencia a la decisión que adoptó la administración de Piñera en 2010, cuando, en el marco de su primer año en La Moneda, retiró la Ley Antiterrorista de las querellas que afectaban a un grupo de comuneros en huelga de hambre como parte de un acuerdo para deponer esa medida de presión.

En esa línea, y junto con pedir "coherencia" a Piñera, la vocera acusó aprovechamiento político del ex presidente y de Chile Vamos cuando faltan menos de dos meses para la elección presidencial y parlamentaria.

"La única manera en que uno podría explicarse estos dichos tan desconcertantes es que los esté usando para conseguir votos", dijo Narváez, agregando respecto de la acusación constitucional que busca la destitución de Fernández que "no se debe hacer uso de estas instituciones de manera abusiva político electoral o que tengan que ver con un ánimo más bien de sacar ventaja política".

De acuerdo a los cálculos del bloque opositor, el libelo acusatorio contra el ministro -que será presentado mañana en el Congreso- podría ser votado por la Cámara de Diputados semanas antes de los comicios del 19 de noviembre.

Los partidos del bloque, además, se han coordinado con el comando de Piñera para preparar la presentación en contra del jefe de gabinete de la Presidenta Michelle Bachelet.

A los cuestionamientos de La Moneda se sumó ayer el abanderado presidencial del PS, PPD, PR y PC, Alejandro Guillier, quien reiteró su parecer de que en Chile no hay terrorismo y apuntó a que "la derecha está haciendo una demagogia y un abuso con los pueblos originarios". En ese marco, recordó que Piñera "también aplicó medidas similares en circunstancias de huelgas de hambre, por lo tanto, tienen que hacerse cargo de su propia historia".

Réplica del piñerismo

La respuesta del piñerismo estuvo en manos del jefe político del comando, Andrés Chadwick, quien apuntó directamente al ministro Fernández, asegurando que el jefe de Interior "considera una 'causa justa' una huelga de hambre de los autores de actos terroristas para presionar al gobierno por su libertad, olvidando por completo a las víctimas del terrorismo y al fatal precedente de un gobierno al aceptar presiones ilegítimas".

Sobre los cambios a la Ley Antiterrorista que impulsó el gobierno de Piñera a partir de septiembre de 2010, Chadwick aseguró que buscaban adecuarse a " exigencias de los tratados internacionales y, una vez aprobadas unánimemente por el Congreso, en razón de dichas modificaciones se recalificaron querellas para adecuarlas a la nueva ley".

"Asuman sus responsabilidades y no le sigan echando la culpa al empedrado", remató.

En octubre de ese año el Ejecutivo alcanzó un acuerdo con huelguistas mapuches que involucraba modificaciones en las querellas y en el que participó la Iglesia.

Ayer, en medio de los cuestionamientos oficialistas a los dichos del ministro Barraza, asegurando que en la Operación Huracán -en que se detuvo a Héctor Llaitul- se "abusó de efectismo comunicacional", el titular de Desarrollo Social señaló que "en Chile las materias de orden y seguridad las lleva el Ministerio del Interior".

También puntualizó que, aunque a su entender Chile "está libre" de terrorismo, "lo que eventualmente puede haber son hechos delictuales, hechos de violencia que revisten una conducta que tiene que ser tipificada como tal".