Durante la tarde de ayer, el patio de los naranjos de La Moneda sirvió de escenario para una cuidada puesta en escena: los ministros políticos del gabinete (Rodrigo Peñailillo, Álvaro Elizalde y Ximena Rincón) realizaron un discurso que puso fin al primer año legislativo del gobierno de Michelle Bachelet.
En la ocasión, los secretarios de Estado entregaron un completo balance de las metas y compromisos cumplidos, junto con destacar la relevancia de las reformas, especialmente los cambios en la educación y al sistema electoral binominal. Esto, además del proyecto de Acuerdo de Unión Civil (AUC).
En el informe, el Ejecutivo registró un total de 105 proyectos aprobados, incluyendo aquellos que ya fueron publicados en el Diario Oficial y los que están a la espera de ser promulgados. De igual manera, se incorporaron en el balance los acuedos internacionales.
Respecto a las iniciativas que se encuentran en tramitación, el gobierno dio cuenta de un total de 87 proyectos.
Durante la actividad, Peñailillo -quien por estos días ejerce el rol de Vicepresidente de la República, mientras Bachelet se encuentra fuera de Chile- dijo que "ha sido un año no sólo de instalación, sino, al mismo tiempo, de avances claros y concretos para nuestro país. Nosotros a esta fecha podemos decir claramente que estamos satisfechos por el trabajo realizado".
Sin embargo, el trabajo realizado durante 2014 fue cuestionado desde algunos sectores de la oposición. "Yo creo que sacaron los proyectos adelante a empujones, sin avanzar en consenso", dijo el presidente de RN, Cristián Monckeberg.
Además, desde la fundación Avanza Chile -ligada al ex presidente Sebastián Piñera- elaboraron un documento propio en el que contrastan la eficiencia legislativa durante 2014, comparada con el primer año de la administración anterior.
En este informe -al que tuvo acceso La Tercera- sólo se contabiliza un total de 83 proyectos ingresados y 26 aprobados (esto ya que en esta última categoría sólo se incorporaron los proyectos que fueron de autoría del Ejecutivo y los que estuviesen promulgados). Esto daría, según Avanza Chile, un 31,1% de eficiencia legislativa, mientras que a Piñera le otorgan un 35,7% en el mismo período.
Así en el estudio de la fundación se dejó al margen el proyecto de fin al lucro, copago y selección, además de la reforma al sistema binominal. Esto, porque aún deben ser revisados por el Tribunal Constitucional. También excluyen el AUC de este conteo, ya que -explicaron- corresponde a una iniciativa que no fue presentada por el gobierno de Bachelet
