No hay historia de éxito sin capítulos oscuros ni polémicos y el caso del iPhone no ha sido la excepción. El smartphone que está pronto a cumplir 10 años en el mercado ha tenido varias polémicas y líos legales durante su historia, incluyendo una pelea épica contra Samsung y otras contra empresas como Nokia, Kodak o HTC.

Y ahora, la empresa dirigida Tim Cook se anota con un nuevo capítulo en tribunales, esta vez con una compañía que quizás los usuarios no conozcan de nombre, pero que está presente en prácticamente todos los teléfonos y dispositivos móviles que existen. Se trata de Qualcomm, empresa que se dedica a crear chips y procesadores, que van desde ocuparse de la recepción de la señal hasta ser el "cerebro" del equipo.

Apple fabrica sus propios procesadores, pero utiliza los chips de Qualcomm para manejar las conexiones inalámbricas prácticamente desde la primera versión del smartphone. Tras años de colaboración, uno podría pensar que la relación entre ambas empresas es miel sobre hojuelas, pero no: el enero recién pasado, Apple demandó a Qualcomm, pidiendo una indemnización de mil millones de dólares para compensar lo que los fabricantes del iPhone definen como "conductas abusivas que rayan en la extorsión".

Apple alega que en su posición de líder del mercado, Qualcomm llega a cobrar hasta 5 veces más que las compañías rivales porque, en lugar de exigir una comisión fija por sus licencias, Qualcomm cobra un porcentaje de la venta de cada teléfono en la que ellos están presentes con su tecnología. De hecho, la compañía gana 3 veces más en su división de patentes y licencias que con su producción de chips y procesadores.

Qualcomm ya ha recibido dos multas por conductas monopólicas en Corea y China, y al parecer el turno ahora es para Estados Unidos.

Pero la empresa no se ha quedado con los brazos cruzados, y en un movimiento que sorprendió a la industria, el día lunes decidió realizar una contrademanda, donde acusan a Apple de varias conductas desleales.

Por ejemplo, en el último modelo del iPhone, donde la empresa decidió usar chips de Intel para empezar a reemplazar de a poco a Qualcomm, la compañía asegura que Apple no utilizó todo el potencial de los productos de Qualcomm solo para mostrar de manera pública que en realidad no hay tanta diferencia con sus proveedores clásicos. Qualcomm dice que Apple los amenazó para que hicieran públicas las comparativas reales de estos productos.

Lo cierto es que esta batalla dará para largo, pero de ninguna manera retrasará la llegada del iPhone 8, ya que para los lanzamientos importantes, todas las rencillas quedan de lado.