"Tenemos otras alternativas que no teníamos en ese momento. Cosas positivas, porque ahora tenemos mayor cantidad de jugadores en determinados momentos o lugares del campo, que nos pueden ayudar a tomar buenas decisiones a la hora de competir".

Así comparaba Martín Lasarte al plantel de Universidad Católica que en noviembre del año pasado quedaba eliminado ante Sao Paulo, por las semifinales de la Copa Sudamericana, con el que esta noche vuelve a medirse ante el conjunto "Tricolor", ahora por los octavos de final del mismo certamen continental (21:15 horas)

Hace casi 10 meses, la UC sólo estaba enfocada en la Sudamericana, ya que no había clasificado a los playoffs del Clausura y, además, ya estaba instalada en la ronda de los ocho mejores de la Copa Chile, fase que se jugó en enero de este año. Hoy, en cambio, está a un punto del líder Cobreloa en el Torneo de Apertura.

Otro aspecto en el que cambió, fue en el gasto que Cruzados SADP desembolsa mensualmente en la planilla. Hace un año, el primer equipo cruzado tenía un costo de 125 millones de pesos, mientras que en la actualidad es de $ 150 millones.

Los sueldos también se vieron aumentados en algunos jugadores. Uno de los casos más relevantes es Tomás Costa, quien pasó de ganar casi ocho millones de pesos a 12, convirtiéndose actualmente en el futbolista mejor pagado de la UC.

A eso se suma la inversión que hizo el cuadro de Las Condes al adquirir el 50% de la carta del volante argentino a Colón de Santa Fe en 800 mil dólares.

Reducción de plantel y cambios en cuerpo técnico

En diciembre pasado, el club que preside Jaime Estévez contaba con 34 jugadores en el primer equipo, situación que varió para este año, luego de que varios abandonaran la precordillera. Entre ellos se cuenta a Nicolás Trecco, David Henríquez, Matías Pérez, Daud Gazale, Kevin Harbottle, Francisco Pizarro y Pablo González.

Y si bien Lasarte se mantuvo en el cargo, pese a los cuestionamientos que surgieron en diciembre y en junio pasado, su staff sí ha visto algunas modificaciones.

El preparador físico Pablo Balbi renunció en marzo de este año, argumentando "problemas personales" que  lo obligaron a regresar a Uruguay. El profesional fue reemplazado por Darío Sepúlveda, padre de Gonzalo, volante cruzado, un antiguo funcionario de la entidad estudiantil.

Una de las cosas que no ha cambiado tanto es que de ese equipo titular, siete jugadores volverán a actuar esta noche. Dos de los que no están son Francisco Silva y Sixto Peralta, que partieron a Osasuna y Universidad de Concepción.

Esta renovada UC tiene la oportunidad de tomarse revancha del Sao Paulo que la privó de llegar a la final de la Sudamericana y que hoy inicia la defensa de su título.