Tiene del año que le pidan. Acusar a su madre de abandono por los medios, desnudos en público, unas cuantas sobredosis de fármacos en el cuerpo y una interminable lista de insultos a celebridades son parte de los extensos episodios que han hecho del rapero Eminem (37) uno de los personajes más mediáticos de los últimos años.
Su adicción a la polémica, más allá de llenar páginas y motivar declaraciones varias, también empujó bastante los buenos dividendos generados por su catálogo, inaugrado en 1996 y que hasta ahora registra seis discos oficiales. Dos de ellos (The Marshall Mathers LP de 2000 y The Eminem Show de 2002) acaban de situar al rapero estadounidense como el artista más vendedor de la década.
Según un estudio de la compañía Nielsen SoundScan -que es la proveedora de las mediciones que publica la revista Billboard, principal referente en el apartado de las ventas de discos-, las más de 32 millones de copias vendidas gracias a provocadoras canciones en tono de hip hop ubican a Marshall Bruce "Eminem" Mathers como el músico más rentable de la década actual. Más aún: el primero los títulos mencionados, y que incluía canciones como The real Slim Shady, vendió 19 millones de unidades.
LA RECUPERACIÓN
Pero su estatus de celebridad y que, entre otras cosas, lo tuvo viviendo un tormentoso romance con la cantante Mariah Carey -y lo llevó a protagonizar su propia película (8 mile)-, le pasó la cuenta. Una rutina de gran parte del día dedicado a los videojuegos, con breves pausas para nutrirse de comida chatarra, lo sumió en un profundo bajón anímico acompañado de una fuerte adicción a analgésicos y antidepresivos.
"Sé lo que significa ser adicto y no poder escapar de eso. Ahora que lo he conseguido estoy contento y puedo decir que soy un hombre nuevo, que he nacido de nuevo", ha dicho el rapero, que hoy asegura que lleva cerca de un año y medio sin consumir medicamentos.
No es casualidad que al abrir su sitio web -www.eminem.com/- aparezca una receta médica ficticia con fecha 21 de diciembre y con el título Relapse: refill, que traducido al español vendría a ser "recaída: recambio". El recambio para el deslenguado rapero, protegido por el también rapero y productor Dr. Dre, será la reedición del disco Relapse -originalmente lanzado en mayo de este año y con ventas que bordean el millón y medio de unidades- y que reaparecerá en la fecha antes mencionada.
La idea, esta vez, es que reaparezca con el gancho de incluir siete nuevas canciones. Entre ellas, algunas que suman colaboraciones de Kanye West y Lil Wayne, otras dos figuras importantes del hip hop actual.
Esa es la manera que ideó Eminem junto a su disquera -Interscope- para acortar la espera por un disco íntegramente formado por canciones originales y que ya tiene nombre. Relapse 2 será el título del próximo álbum del rapero nacido en Saint Joseph, Missouri.
El trabajo contará con la colaboración de Dr. Dre, rapero que ha apadrinado su carrera desde los más tempranos inicios, y está programado para la primera mitad de 2010. Aunque todo está tranquilo en la vida de Eminem, la experiencia dice que con él nunca se sabe.
