Terminaron un ciclo y dieron un paso al costado. Raúl de la Puente y Arturo Martínez, históricos dirigentes gremiales, renunciaron a continuar representando a las principales organizaciones sindicales del país; el primero al mando de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (Anef) por 20 años, y el segundo renunció a una amplia trayectoria al interior de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), como dirigente, presidente y secretario general por casi 30 años.
Tras sus respectivas salidas, ambos decidieron darle un giro a su vida y se enfocaron en nuevos proyectos, formando fundaciones asesoras de organizaciones sociales y sindicales.
Enfocado en su fundación
El 6 de noviembre de 2016, Raúl de la Puente sorprendió a gran parte de la Anef -gremio que reúne a cerca de 72 mil trabajadores del sector público- al informar que no repostulaba a la presidencia, cargo que ocupó por 20 años.
A nueve meses de esa decisión, se declara enfocado 100% en la Fundación Inclusión, una firma que se dedica a la capacitación, formación y asesoría de trabajadores y dirigentes que están comenzando en el mundo sindical.
De la Puente formó la institución junto al abogado y presidente de la Asociación de Funcionarios del Consejo de Defensa del Estado, Helmuth Griott, y al economista y Carlos Briceño. "Ahora estoy en una etapa en la que me estoy reinventando. Siempre he pensado que entre dirigentes sindicales debemos potenciarnos y ayudarnos, transmitir la experiencia que uno ha tomado por años y años en las organizaciones sindicales del país me parece una buena forma de mantener el sindicalismo vivo", dijo Raúl de la Puente.
Fundación Inclusión comenzó a operar formalmente en mayo de este año, y según explicó Raúl de la Puente es una institución sin fines de lucro. "Funcionamos con los aportes voluntarios que nos dan los dirigentes y asociaciones con las que trabajamos. Acá no se trata de generar dinero, sino de transmitir experiencia y capacitar a los dirigentes que llegan con la voluntad de poder servir a sus compañeros pero no cuentan con la capacidad técnica", explicó.
Bajo el alero de esta iniciativa, ha iniciado conversaciones con académicos de la Universidad de Chile, de Los Lagos y la U. Central para llevar a las aulas la formación sindical. "Estoy ad portas de concretar una reunión con la Universidad Mayor para hablar sobre la importancia de este tema (...) extraño a la Anef, pero me gusta esta nueva vida", reconoció.
Por una nueva Central
"Renunciaré a la Central, no quiero ser parte de esta crisis". El 16 de febrero de este año, Arturo Martínez anunció su salida definitiva de la CUT, dando término a una trayectoria gremial de casi 30 años.
Hoy, ubicado en una oficina en calle Valentín Letelier, trabaja desde marzo junto a abogados, economistas, asistentes sociales y dirigentes, en la Fundación de Estudios Laborales y Sindicales (FELS), en la que entrega asesoría para federaciones y sindicatos.
"Ayudamos en materias de negociaciones colectivas, vocerías sindicales, elaboración y reforma de estatutos, etc. Todo sin costo, porque la fundación se sustenta sólo con donaciones que recibimos. Pretendemos postular a fondos concursables de escuelas sindicales y otros proyectos para impulsar la fundación", precisó el histórico dirigente.
Este nuevo proyecto, según explicó Martínez, comenzó a 'idearlo' en los meses previos a su salida pública de la Central.
"Comencé a proyectar mi salida de la CUT a fines del año pasado, y en esos momentos pensé que en esta segunda fase mi aporte y ayuda a los sindicatos debía continuar", dijo.
A la fecha, apuntó, FELS trabaja con 15 federaciones, 6 confederaciones y 26 sindicatos nacionales, a los que apoya y asesora en materia sindical.
Otro proyecto en el que también trabaja Martínez es la formación de la Central de Trabajadores del Sector Privado, proyecto que quiere concretar a fines de este año.
"La idea de formar una nueva central es darle visibilidad a los sindicatos privados y a aquellos que no están asociados a ninguna agrupación de mayor tamaño. El tema no es disputarse el protagonismo con la CUT. Solo queremos potenciar un sector que estaba en segundo plano, porque en la Central los que brillan son los públicos, los profesores, los trabajadores de la salud, etc. Estamos trabajando en este proyecto, por eso lo estamos haciendo con tiempo, queremos iniciar esta nueva central con unos 100 mil trabajadores asociados", enfatizó Martínez.