El Consejo de Seguridad de la ONU votará este miércoles una resolución que autoriza el envío de dos mil combatientes de refuerzo a la misión del organismo en Costa de Marfil (UNOCI), según dijo su presidente de turno, el embajador bosnio Iván Barbalic.

El proyecto de resolución auspiciado por Francia y EEUU en un principio debería haberse adoptado hoy, pero discrepancias de último minuto sobre algunos detalles obligaron a posponer su adopción, que ahora parece asegurada.

"No hay desacuerdos, la adoptaremos", aseguró Barbalic a la salida de una reunión del máximo órgano de seguridad de Naciones Unidas.

El documento que considerará el Consejo de Seguridad también exige a los medios de información partidarios de Gbagbo que pongan fin a la "propagación de información falsa" para incitar a la violencia contra los "cascos azules".

Asimismo, da el visto bueno el despliegue de tres helicópteros artillados de la misión de la ONU en la vecina Liberia (UNMIL) y amplía cuatro semanas más la estancia de los 500 efectivos de refuerzos de UNIML que ya se habían enviado a finales del año pasado.

La cifra de dos mil nuevos combatientes corresponde a los refuerzos que pidió la semana pasada el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para de esta manera aumentar las fuerzas de UNOCI hasta cerca de 11.500 militares y policías.

El enviado especial de la ONU a Costa de Marfil, Choi Young-jin, señaló que la misión necesita los refuerzos para hacer frente a una situación cada vez más hostil y garantizar la protección de los civiles, particularmente en los barrios de seguidores de Alassane Ouattara, a quien la comunidad internacional considera ganador de las elecciones del pasado noviembre.

Choi insistió en que la crisis sólo puede resolverse con la salida de Gbagbo del poder y el respeto de la "voluntad" expresada en las urnas por el pueblo marfileño.

Choi señaló que en los últimos 10 días se han incrementado las acciones contra la UNOCI, ya sea por disparos contra sus vehículos o el asalto de sus camiones, que en algunas ocasiones han sido saqueados por grupos de jóvenes instigados por los partidarios de Gbagbo, aseguró.

También resaltó que se está deteriorando la situación en el Hotel Golf, sede del Gobierno de Ouattara, que permanece cercado por partidarios del actual gobernante desde hace mes y medio.

Gbagbo fue elegido presidente en 2000 para cinco años y se ha mantenido otros cinco en el poder debido a retrasos en la convocatoria de los comicios por la guerra civil, de 2002 a 2007, que dividió al país entre el sur, leal al Gobierno de Abiyán, y el norte, controlado por las Fuerzas Nuevas del actual primer ministro, Guillaume Soro.