El coordinador humanitario de la ONU en Sudán del Sur, Toby Lanzer, aseguró hoy que la organización está preparada para ampliar la distribución de ayuda humanitaria en el país africano, tras el acuerdo entre el régimen y los rebeldes de un alto el fuego.
Lanzer dio la bienvenida al pacto alcanzado ayer en Adis Abeba y destacó el compromiso de las partes de cooperar con la ONU y otras agencias humanitarias para facilitar que la ayuda llegue a los millones de personas afectadas por el conflicto de los últimos cinco meses.
En un comunicado, el responsable de la ONU insistió en que es "vital el acceso completo" a la población, incluyendo el transporte de ayuda de emergencia por carretera y en barcazas a ciudades como Malakal y Bentiu.
Lanzer lamentó "las grandes consecuencias humanitarias" de los cinco meses de enfrentamientos y se congratuló de que el cese de las hostilidades permitirá a la población "moverse de forma segura".
Este encuentro fue el primero cara a cara entre los dos rivales desde el inicio de la crisis, a mediados del pasado diciembre.
El acuerdo apunta a un futuro alto el fuego permanente y a la formación de un gobierno de unidad nacional transitorio.
También estipula la apertura de corredores humanitarios en el país y desplegar el Mecanismo de Monitorización y Verificación (MVM, por sus siglas en inglés), que investigará en el terreno si han cesado las hostilidades acompañado de militares.
El conflicto estalló a mediados de diciembre pasado, cuando en la capital sursudanesa se libraron combates entre el Ejército y militares insurgentes, y Kiir acusó a Machar de intentar dar un golpe de Estado.
Desde entonces, se han sucedido los enfrentamientos, que han causado miles de muertos y colocado al borde de la guerra civil al joven país, que se independizó de Sudán en julio de 2011.