El inicio del Transición ha sido cuesta arriba para la UC. Con un empate y una derrota, los cruzados suman apenas un punto y el ambiente, desde ya, comienza a enrarecerse. El sábado, durante y después del choque ante Unión Española, los hinchas se manifestaron en duros términos contra Mario Salas. La paciencia entre los fanáticos es cada vez menor.

Los estudiantiles han desarrollado un juego opaco y están muy lejos del nivel que los llevó, no hace mucho, a la cima del fútbol chileno. Por si fuera poco, el bajo rendimiento exhibido ha generado una falta de gol evidente, situación atípica en la precordillera, al menos con el Comandante en la dirección técnica del equipo.

Los estudiantiles no registran anotaciones durante el presente campeonato y, en los cuatro partidos que han disputado en el segundo semestre, considerando la Copa Chile, el Transición y la Supercopa, han anotado apenas dos.

Esta cifra preocupa en la UC, sobre todo si se toma en cuenta que, después del último gol de la primera mitad del año, obra de Noir a los 85' de la caída 2-3 ante Atlético Paranaense por Copa Libertadores, los de la franja han convertido una vez cada 228 minutos. Exiguo.

El negativo registro se encamina a ser de los peores de la historia del club. De hecho, la actual racha de tres partidos sin anotar en Primera División (las dos fechas que se han jugado del Transición más la última jornada del Clausura pasado), iguala una magra estadística que data de 2006 cuando, bajo la dirección técnica de Jorge Pellicer, los de Las Condes estuvieron sin marcar durante tres partidos consecutivos, entre el 29 de abril y el 14 de mayo de 2006.

Las críticas, además de al técnico, apuntan al uruguayo Santiago Silva, llamado a liderar la ofensiva de los capitalinos, sin embargo éste sigue sin suerte de cara al gol y, al menos en el último encuentro ante los hispanos, el rendimiento colectivo tampoco ayudó mucho al lucimiento individual del Tanque.

Mario Salas, sin embargo, públicamente evita dramatizar con la situación y se aferra a la convicción de seguir trabajando para revertir el mal momento. "Ya hemos tenido otros malos comienzos. Estamos trabajando. Vamos a hacer todo lo que esté en nuestras manos para poder ganar los partidos", dijo la noche del sábado tras la derrota frente a los de Independencia. "Hay un problema en la generación y en la elaboración de las jugadas. Vamos a hacer todo lo posible, todo lo que esté en nuestras manos para mejorar esa situación", añadió.

"Ahora vamos a ver de qué estamos hechos. No tengo dudas de que vamos a salir adelante. No nos vamos a caer", arguyó también. "Nos duele lo que está pasando, pero no vamos a renunciar. Vamos a seguir adelante. Hay que hacer todo por ganar el próximo encuentro", sentenció.

Y el miércoles, ante Rangers, en la revancha de la primera fase de la Copa Chile, tendrán una buena oportunidad para iniciar la redención. Que no servirá de mucho si el sábado, ante Everton, no logran sumar de a tres y acallar las críticas. No será fácil, porque los ruleteros vienen de golear a San Luis por 4-0 y como uno de los líderes de la tabla. Un nuevo tropiezo cruzado podría comenzar a hacer tambalear las convicciones.