La plaza romana de Campo de Fiori es famosa en todo el mundo por muchas y muy diversas razones. Por su intensa y alegre vida nocturna, por su mercado de flores (y muchos otros productos), por ser el lugar en que el científico Giordano Bruno fue ajusticiado por la Inquisición y, no menos importante, por su gran oferta culinaria.

Los puestos ambulantes del mercadillo, las panaderías, las "salumerías", las charcuterías, las pizzerías, las "hostarías" y los restaurantes surgen a lo largo de todo el espacio de la plaza del Campo de Fiori, uno de los típicos lugares de Roma, ofreciendo al paseante los mejores productos de la industria alimentaria italiana, ya sean frescos o preparados.

Uno de los locales más conocidos es el restaurante "La Carbonara", que ocupa uno de los lados cortos de la plaza y donde han cenado muchos ilustres personajes del panorama italiano e internacional.

Situado, según la propia publicidad del restaurante, "directamente bajo la mirada de Giordano Bruno", cuya estatua domina la plaza, ofrece una selección de cocina romana típica, con platos como "abbacchio arrosto" (cordero asado) o "trippa alla romana" (callos con salsa de tomate y queso), completada con pastas más universales, como la misma "carbonara".

También presume de espíritu típicamente romano la "Hosteria Romanesca", con especialidades como los "spaghetti cacio e pepe", receta muy simple preparada con pimienta y el queso "pecorino romano", el "abbacchio scottadito" (de nuevo cordero, esta vez cocinado a la parrilla y con pimienta) y pastas al horno, como la lasaña.

El restaurante "Baccanale" propone degustaciones de platos y vinos regionales italianos, como las "melanzane al funghetto" (plato siciliano a base de berenjenas y tomates), acompañadas del vino "Syrah" de Sicilia, la "bruschetta" de "ciauscolo", un embutido para untar típico de la región de Las Marcas con el vino "Verdicchio".

Dentro de la inacabable oferta de los restaurantes de Campo de Fiori, hay tanto para quien prefiere la verdura, con las ensaladas de la "Pizzeria Virgilio", como para los que prefieren la carne.

El restaurante "Campo de Fiori", especializado en carnes y pescados, ofrece platos como el "ossobuco" y el bacalao "a la romana".

Pero no sólo los restaurantes distinguen este rincón del centro histórico romano, sino la calidad de lugares como el "Forno Campo de Fiori", una panadería tradicional que también proporciona, para quien quiera comer rápidamente pero sin perder un ápice de sabor, pizzas, "pizza bianca ripiena" (o masa de pizza rellena) y "arancini" sicilianos, es decir, bolas de arroz rebozadas y rellenas de queso mozzarella, carne o arvejitas, entre otras cosas.

Otros negocios como la "Salumeria Ruggeri" o la "Antica Norcineria Viola"