Chile dijo hoy en la VII Cumbre de las Américas que "no tiene asuntos pendientes con Bolivia" y que el contencioso con La Paz sobre el acceso al mar fue resuelto en 1904 cuando se establecieron las fronteras "de manera perpetua".

El responsable de la delegación chilena en la cumbre, el canciller Heraldo Muñoz, en representación de la presidenta Michelle Bachelet, quien canceló su presencia en Panamá por las inundaciones que sufrió el norte de Chile, protestó por la intervención del presidente boliviano, Evo Morales.

Muñoz dijo que lamentaba iniciar su intervención con "una réplica a Bolivia" porque "esta Cumbre de las Américas no es para ver asuntos bilaterales sino para discutir sobre equidad, prosperidad y el futuro de la región".

El canciller aseguró que "Chile no tiene asuntos pendientes con Bolivia. Los resolvió el año 1904 cuando ambos países en el tratado de Paz y Amistad, establecieron sus fronteras de manera perpetua".

"De modo que lamentamos esta intervención (del presidente Morales)", continuó.

Tras elevar su protesta, Muñoz alertó que "son momentos difíciles" para Latinoamérica ante las rebajas de previsión de crecimiento económico para este año y los próximos lo que "puede afectar los logros sociales que ha obtenido la región".

El representante chileno también señaló que el Gobierno de Bachelet quiere enfrentarse a la desigualdad que existe en Chile con una reforma fiscal que tributará más "a los que más ganan" para financiar una reforma educativa y otras inversiones sociales que permitirán "cambiar la estructura productiva" del país.