La solicitud presentada por la Fiscalía de Milán para registrar la oficina del contable del primer ministro, Silvio Berlusconi, se definirá el próximo martes cuando sea debatido por la Cámara de Diputados. Esto, en el marco de la investigación que se sigue contra el primer ministro italiano por el escándalo de sexo, prostitución y abuso de poder, que estalló tras el caso de la joven marroquí Ruby.

La decisión la adoptó la Junta para las Autorizaciones de la Cámara luego que el diputado Antonio Leone, miembro del partido de Berlusconi (el Pueblo de la Libertad), realizara la petición, según los medios italianos.

Los fiscales milaneses sospechan que en la oficina del contable, Giuseppe Spinelli, podrían encontrarse pruebas sobre supuestos pagos a numerosas jóvenes para que asistieran a las fiestas privadas de Berlusconi.

La Junta tiene hasta el 14 de febrero para pronunciarse sobre la petición de la Fiscalía, que fue presentada este lunes, informó el diario "Corriere della Sera" en su página digital.

El debate tendrá lugar en un clima de estupor en Italia, donde la oposición ha pedido la dimisión del jefe del Ejecutivo, una posibilidad que Berlusconi rechazó en las últimas horas, antes de una reunión con sus correligionarios y sus abogados para abordar las posibles implicaciones de la investigación.

"Mis abogados me han dicho que, considerando que el de Milán no es el tribunal competente, no es lógico que vaya a testimoniar", explicó Berlusconi.

Berlusconi sigue cada vez más complicado por los pedidos de dimisión que llegan desde el ala opositora y los reclamos de la Iglesica Católica, y el estado de turbulencia del pueblo italiano, según admitió el presidente Giorgio Napolitano.