Visto para sentencia quedó el juicio de Claudio Bravo contra la Real Sociedad a raíz de la demanda interpuesta por el arquero al club de la ciudad de San Sebastián. Bravo exige 1,3 millones de euros por su traspaso al FC Barcelona.

Lo que reclama Bravo, es el pago de la cláusula del 10% que agregó en su último contrato con la Real, pero que con los azulgrana renunció a firmar en 2014.

La Real estuvo representada en el juzgado de Magistratura de trabajo de Barcelona por el gerente del club, Iñaki Otegui, y por el abogado Javier Hernáez. El letrado se mostró optimista a la salida del juzgado.

"Salió todo bien. Estamos contentos", fue lo único que declaró Javier Hernáez, abogado de la institución demandada, luego de la sesión que comenzó con atraso por una falsa alarma en el edificio.

De "improcedente" calificó el club el reclamo de Bravo durante el juicio, ya que considera que no debe de pagarle ni un euro al chileno. El guardameta fichó por el Barça al finalizar la temporada 2013-14 por 13 millones de euros. La Real Sociedad defiende que el portero renunció a la prima por dicho fichaje y no está de acuerdo con su solicitud.

En el contrato con fecha del 1 de julio de 2014, hay una cláusula firmada por los tres protagonistas -Barcelona, la Real y Bravo- en la que el capitán de la Roja rechaza cobrar el dinero alegando que lo compensaba con el sueldo que iba a recibir en el cuadro culé. Por lo mismo, los representantes jurídicos de la institución blanquiazul se muestran tranquilos. El plazo para presentar las reclamaciones salariales es de un año y el guardameta decidió presentar la suya el 30 de junio de 2015, es decir, un día antes de que prescribiera.

Bravo explicó que el documento que suscribe él en el que se recogen todas las remuneraciones que iba a recibir en su etapa como jugador del Barcelona, lo firmó "sin darse cuenta", porque no fue "informado suficientemente". Bravo reconoció que entonces estuvo asesorado por el que aún hoy es su representante, Cristián Ogalde, y durante las negociaciones entre las tres partes implicadas hubo intercambio de diferente documentación y correos electrónicos.

El portero ya se encuentra en Moscú concentrado con la selección chilena para el debut de Copa Confederaciones ante Camerún.