La cesión de los derechos de transmisión del fútbol chileno, conocido coloquialmente como la venta del Canal del Fútbol, entró en su etapa final. La ANFP estableció como último plazo el 30 de septiembre para que los interesados en hacerse del capital más importante de los clubes nacionales de Primera y Primera B presenten las ofertas vinculantes que cumplan con las expectativas de los 32 asociados al organismo establecido en avenida Quilín.

Hasta la sede del fútbol local llegaron cuatro ofertas indicatorias, no definitivas, según confirman a La Tercera fuentes de la administración de la ANFP y del Consejo de Presidentes. Las propuestas preliminares corresponden a ESPN, Fox Sports, Liberty y un fondo de inversión extranjero. Todas pueden mejorar sus ofertas hasta el último día de septiembre, mismo plazo que tendrán otras compañías que no hayan manifestado aún su interés en este negocio.

En Quilín, consultados por este medio, hablan de un proceso de licitación flexible, el que exige por ahora garantizar factores mínimos, pero escenciales para adjudicarse los derechos de transmisión del fútbol nacional, que desde 2003 están a cargo de GTV, con la creación de la sociedad Servicios de Televisión Canal del Fútbol Limitada, compañía creada por la ANFP (presidida en ese entonces por Reynaldo Sánchez) y el empresario Jorge Claro, quien hoy posee el 20 por ciento.

Los postulantes al CDF deben cumplir con ciertas obligaciones, según los detalles del proceso de licitación que han sido informados a miembros del consejo de presidentes y que fueron ratificados por autoridades de la ANFP. Uno es el pago de UF 6.500.000 a Jorge Claro, quien recaudará US$ 267 millones por la cesión de su parte de la señal. Además, quien quiera llevarse el canal deberá depositar US$ 2 millones a cada uno de los 32 clubes del Consejo.

Otro requisito es garantizar un flujo bruto de al menos $ 50.000 millones (US$ 80 millones) por el 80% correspondiente a los derechos que hoy posee la asociación y que debe ser repartido el primer año de gestión de la compañía que se adjudique la concesión. Es en este punto donde las opiniones están divididas, puesto que el reparto proyectado para este año es de $37.573 millones líquidos (impuesto pagado). Es decir, US$ 60,1 millones, tomando en cuenta los datos que arroja el estado de resultado del mes de junio en la contabilidad del CDF, a los que tuvo acceso La Tercera. Esta cifra se vería apenas incrementada en el caso de aceptar una oferta por el mínimo, debido a que los clubes recibirán esos fondos brutos (impuestos por pagar), lo que ya tiene detractores.

"De acuerdo a esas cifras, el negocio no debiera hacerse, si tomamos el crecimiento real. Como Audax no queremos hipotecar el fútbol chileno, queremos que la industria sea sustentable en el tiempo. No nos vamos a dejar llevar por el plazo fatal y vamos a proponer seguir tal cual y potenciar el producto", señaló con fuerza el gerente general de Audax Italiano Lorenzo Antillo hijo.

Desde el punto de vista tributario, el único club que se vería beneficiado con el nuevo modelo sería Provincial Curicó Unido, "cuya organización corresponde a una corporación sin fines de lucro y, por ende, no paga impuesto a la renta", señala su presidente Pablo Milad, quien de paso advierte que "todavía hay otra serie de factores a analizar antes de tomar una decisión" sobre el traspaso de la señal.

Los años complican

Las ofertas recibidas por la ANFP adelantan una nueva discusión. El plazo que ofrecen concesionar las diferentes compañías será relevante a la hora de elegir entre una y otra. La oferta no vinculante de Fox es a 20 años, mientras que las otras tres ofertas (ESPN, Liberty, Fondo Inversión) proyectan una concesión de 15 años. Las cuatro propuestas todavía se consideran excesivas entre la mayoría de los dirigentes del fútbol chileno. El plazo no genera adhesión. "Nosotros estamos por un plazo de diez años, es un tiempo criterioso, es un plazo decente", recalca Antillo.

Por su parte, un representante de los llamados clubes grandes indica que "20 años es muy largo, es parte del análisis que se debe hacer. Hay que dedicarle tiempo a un análisis profundo. Seguramente están pidiendo más años para recuperar la carga inicial y eso se tiene que evaluar bien".

En este punto, la ANFP recibió una recomendación directa de parte de GTV (Jorge Claro), quien sugirió una "Concesión a 10 años plazo", según consta en un documento que llegó a Quilín en 2016. Los oferentes, en por su parte, también deben garantizar la transmisión completa de todos los partidos de la Primera División.

Otro elemento que genera preocupación y debate entre los presidentes tiene directa relación con el pago de los US$ 2 millones para cada club al momento de la firma de la cesión de derechos. "La obtención de ese dinero, sin duda, hace que muchos no analicen y eso puede ser peligroso. No queremos el análisis pan para hoy y hambre para mañana", advierte una de las principales autoridades de clubes de alta convocatoria.

"A nosotros no nos puede pasar la cuenta la desesperación de algunos clubes. Vamos a tomar una decisión que nos va a determinar los flujos por los próximos 15 años y es el flujo más importante para los clubes del fútbol chileno", señala por su parte Felipe Muñoz, presidente de Deportes Copiapó, líder de los equipos de la Primera B. El tiempo se agota, parte de las propuestas que ya se han filtrado entre los clubes todavía no convencen. Y desde ANFP, en tanto, llaman a la calma: "Todavía hay plazo para que los interesados mejoren sus ofertas", aseguran.