El ciprés de cordillera (Austrocedrus chilensis) puede medir hasta 25 metros. De copa piramidal y un tronco que llega a los dos metros de diámetro, se puede encontrar desde la Región de Valparaíso a Los Lagos, convirtiéndola en la conífera de mayor distribución del país.

La repartición, no obstante, es muy discontinua, al punto de que hay zonas donde ya no han vuelto a nacer ejemplares nuevos, lo que generó que la especie fuera catalogada como Vulnerable -con alta probabilidad de pasar a En Peligro de Extinción- según la Lista Roja de especies en peligro, elaborada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN).

Sin embargo, según la última actualización del catálogo, presentada ayer, la especie pasó de Vulnerable a Casi Amenazada, por lo que su conservación depende de las medidas que se tomen.

Charif Tala, del departamento de biodiversidad del Ministerio del Medio Ambiente, dice que es difícil saber por qué el ciprés de cordillera había sido declarado Vulnerable. "Es una clasificación que recibió de Conaf en 1985, pero es probable que sea por su distribución y porque entonces había extracción de leña".

Se trata de una de las especies nacionales que mejoró su estatus, recalificación que también favoreció al ciprés enano (Lepidothamnus fonkii), conífera que alcanza hasta 50 centímetros y que habita desde la Región de Los Ríos a Magallanes, que pasó de Vulnerable a Preocupación Menor, ya que, según la IUCN, ya no presenta amenaza de desaparecer en un futuro próximo.

Craig Hilton-Taylor, experto de la IUCN, explicó a La Tercera que todas las coníferas chilenas fueron evaluadas por expertos del Jardín Botánico Real de Edimburgo y expertos en Chile y Argentina (los árboles se distribuyen en ambos países).

Explica que se trata de un trabajo habitual en la organización. Por ejemplo, lo hicieron para evaluar los cactus, donde expertos chilenos participaron en un taller en 2012. "Tratamos en lo posible de vincularnos con expertos en especies de los países para las evaluaciones", indica.

DIVISION ENTRE EXPERTOS

Lohengrin Cavieres, investigador del Departamento de Botánica de la U. de Concepción, explica que ambas especies crecen en zonas no intervenidas por el hombre, en la alta montaña, por lo que "mientras sigan así, es decir, no se instale una minera o una represa, no habrá mucha explotación".

Pero al académico Carlos Lequesne, investigador de flora de la U. Austral, le llama la atención el cambio del ciprés de cordillera. "En la medida que crece en lugares remotos, uno podría pensar que no está tan amenazado, pero su distribución no es continua y la regeneración no es muy alta", asegura. Está en pocos parques nacionales y su madera de calidad la hace un blanco apetecible.

"Yo lo habría puesto más crítico. En Chile no tenemos la misma distribución que en Argentina, y hay regiones donde está desapareciendo. Además, el cambio climático también podría imprimirle una presión", agrega.

NUEVOS EN LA LISTA

A nivel nacional, 179 especies nativas chilenas están en alguna categoría de amenaza, según la IUCN, de las más de30 mil especies del país.De ellas, 40 están en Peligro Crítico; 45, en Peligro, y 94, Vulnerables.

A nivel global, de las 71.576 especies evaluadas, 21.286 están amenazadas. De esas, cerca de la mitad son Vulnerables, 30% está En Peligro y 20% En Peligro Crítico, con un riesgo alto de desaparecer del estado silvestre.b