La Revolución Bolchevique o Revolución de Octubre, que este año cumple 100 años, marca un antes y un después en la historia del mundo moderno. Los 10 días que estremecieron al mundo, como bien lo describió el periodista John Reed, removieron no solamente el campo de la política sino también el del arte y la vida social en general.
Es difícil imaginar en estos tiempos el impacto que un acontecimiento como este tiene en una sociedad, talvez solo comparable en la era moderna con lo sucedido a partir de la Revolución Francesa. La Revolución de Octubre rompió con siglos de monarquía zarista e implicó un cambio radical en la vida no sólo de los rusos sino del mundo entero. Este nuevo modelo de pensamiento involucró al arte en un sentido absoluto, implicando una ruptura vanguardista sobre la manera de pensar y retratar la vida.
Varias muestras y conferencias estarán conmemorando el centenario. Una de las más importantes es la que se está presentando hasta el 17 de abril, en la Real Academia de Artes en Londres con el título de Revolution: Russian Art 1917-1932. En ella se incluyen piezas de pintura, fotografía, escultura, cine y diseño gráfico, en un recorrido que abarca desde los inicios de la revolución hasta la instauración del régimen de Stalin, con obras nunca antes vistas en el Reino Unido.
Este periodo se destacó por la efervescencia cultural y política y las posibilidades que se generaron para construir un arte totalmente nuevo. Un "período de 15 años, entre 1917 y 1932, cuando las posibilidades parecían inicialmente ilimitadas y el arte ruso floreció en todos los medios" indica la descripción de la muestra.
En el Hermitage de Amsterdam, por su parte, se retrata el otro lado de la moneda, con una muestra titulada 1917. Romanovs y Revolución, en la que se muestran a través de objetos, pinturas, fotografías y diarios de vida, los últimos momentos del zar Nicholas II y su familia.
En México la edición número 45 del Festival Internacional Cervantino, del 11 al 29 de octubre, tendrá como invitados de honor a Francia y al Estado de México, con el eje temático Revoluciones: 100 años de la Constitución mexicana y de la revolución rusa, relacionando las dos principales revoluciones de comienzos del siglo XX.
Importantes autores como Marc Chagall, Wassily Kandinsky, Boris Kustodiev, Isaak Brodsky, Kuzma Petrov-Vodkin y Kazimir Malevich forman parte de esta época en la que se relacionaban movimientos como el futurismo ruso, el cubismo y el constructivismo, mezclando la abstracción y lo geométrico, al tiempo que se difundían las ideas del nuevo orden socialista.
Dos grandes movimientos artísticos se desarrollaron al alero de la revolución: la vanguardia rusa y el realismo socialista. Estos géneros abarcaron todo tipo de creación artística, incluyendo poesía, pintura, escultura, teatro, literatura y cine. Finalmente terminaron enemistándose y al final sólo el realismo socialista prevalecería bajo el régimen de Stalin quien suprimió todo otro tipo de expresión.
La celebración del centenario de la revolución no está lejos de crear controversias. En la propia Rusia, Vladimir Putin mira con recelo el levantamiento bolchevique. "La sociedad rusa en general necesita un análisis profundo, honesto y objetivo de estos eventos. No podemos arrastrar hasta nuestros días las divisiones, los odios, las afrentas y la crueldad del pasado. Recordemos que somos un pueblo unido. Un sólo pueblo. Y Rusia solo hay una", declaró en diciembre
Pero a pesar de estas discusiones y controversias, es indudable la relevancia de la revolución rusa y sus consecuencias en el mundo del arte, con nuevas experimentaciones y vanguardias.