Parece un chiste fácil. Una broma que hace leña de una eterna fama de excesos y escándalos. Pero no. Esto es en serio: Charly García (57) está viviendo una vida sana. Tal cual. El argentino acaba de cumplir un año en una etapa que no deja espacio alguno a adicciones. En lugar de protagonizar escándalos, Carlos Alberto García ocupa su tiempo en sesiones de yoga y meditación, en ejercitar su cuerpo y disciplinadas jornadas musicales. Ya no hay whisky con hielo, sólo bebidas  de fantasía.

"Está súper serio y sano. Uno de sus principales pasatiempos es componer. En los últimos meses ha avanzado harto en nuevas canciones y está muy entusiasmado con eso", comenta un cercano a la intimidad del músico, que en esta nueva etapa ha subido cerca de 10 kilos y acaba de mudarse. Luego de vivir casi un año en la residencia de su amigo Ramón "Palito" Ortega, en la localidad de Luján, ubicada en las afueras de Buenos Aires, el ex Sui Generis se cambió a un departamento en el Barrio Norte de la capital argentina. Un grupo de enfermeros, kinesiólogos y terapeutas se turnan para velar para que se mantenga a raya en el tratamiento de rehabilitación.

¿Cómo se enderezó el rockero indomable? Simplemente tocó fondo. Fue una noche de furia en Mendoza en que García demolió la habitación de su hotel y golpeó a todos los que intentaban calmarlo. Esa noche de junio de 2008, Charly García terminó amarrado a una camilla por la policía y días más tarde figuraba sedado en un hospital de Buenos Aires. De ahí pasó a un clínica siquiátrica y luego a la estancia de "Palito" Ortega, donde fue autorizado por la justicia a continuar un tratamiento de rehabilitación de drogas que continúa hasta hoy.

"Imagínate, él está acostumbrado a hacer todo lo que quiere y para una persona que consume todo lo que el consumía, no es fácil cambiar. Pero supe que ahora está tranquilo, debe ser raro ver a Charly tranquilo, porque uno está acostumbrado a que siempre sale con alguna sorpresa", dice Miguel "Negro" Piñera, cercano al argentino que en estos días ensaya en Buenos Aires junto al trío de músicos chilenos que comparte con el hermano bohemio del candidato presidencial. El plan de Charly García es grabar un nuevo disco y luego volver a los escenarios. Pero se lo está tomando con calma. Sin presiones ni plazos.