Todo Chile está expectante con la suerte de la Selección en Medellín. Más aún, los seleccionados se pusieron como objetivo fundamental conseguir la clasificación al Mundial de Sudáfrica ante Colombia. Para que ello ocurra, claro está, la "Roja" debe vencer a la escuadra de Eduardo Lara.
Considerado como el partido más importante de las Eliminatorias, Marcelo Bielsa y sus jugadores están completamente mentalizados en el trascendental juego del sábado. Es en tierra "cafetera" donde quieren asegurar los pasajes a la Copa del Mundo y no en el estadio Monumental frente a Ecuador.
Sabiendo esto, el rosarino implementó un régimen de concentración especial. Muy diferente a lo que había pasado durante las clasificatorias, decidió concentrar desde el martes en Juan Pinto Durán, para que el plantel se desconecte del fervor e impaciencia que existe en el entorno.
Un día normal
La rutina es así. Antes de las 9 horas ya están levantados y preparándose para la primera práctica del día. Luego de que un grupo atienda a la prensa, inmediatamente almuerzan.
Después, la orden del rosarino es clara: descansar. Y para eso, los obliga a entrar a sus dormitorios para que duerman. Tras la siesta (obligatoria, por cierto), inmediatamente se dirigen al salón de videos de Pinto Durán a observar videos. El martes, por ejemplo, vieron los mejores pasajes de la "Roja" ante Brasil.
Luego, nuevamente a la cancha. Hasta ayer tuvieron la "libertad" de salir un par de horas hacia sus hogares. Pero ya a las 22.00 estaban de regreso en el búnker de Avenida Las Torres.
Poca diversión
Espacios a la entretención, evidentemente, no tienen. Los pocos momentos de distracción, los jugadores los ocupan para jugar básquetbol en el único aro que existe en el complejo o en la sala de juego compuesta por un taca-taca y mesas de pimpón y pool.
También tienen la posibilidad de jugar PlayStation, donde Alexis Sánchez también es el "Niño Maravilla". Y a los que no les agrada el fútbol virtual, tienen la posibilidad de chatear gracias al wi-fi que tienen todas las habitaciones. Eso sí, hasta una hora determinada. Por orden de Bielsa, se desconecta en la noche. Según el DT, para un descanso completo, es fundamental dormir al menos ocho horas.