En una de sus últimas conferencias de prensa como técnico de Chile, mientras bromeaba con un conocido relator radial, Marcelo Bielsa le dijo que en Europa sabían menos de fútbol que en Rosario. El "Loco" fue especifico, no habló de Argentina, sino que de Rosario. Y es que los que nacieron o se identifican con esa ciudad defienden la idea de que es la capital del fútbol transandino y la cuna de los más grandes exponentes de la actividad. Ahí es donde hoy, Universidad de Chile por Copa Libertadores buscará un triunfo ante Newell's Old Boys.

Rosario es la tercera ciudad con más habitantes de Argentina y no sólo se enorgullece de sus "hijos" en el fútbol. El revolucionario Che Guevara, el cantante Fito Páez, el escritor Roberto Fontanarrosa y la modelo Valeria Mazza también nacieron en esa ciudad.

Al hablar de fútbol la lista crece y el orgullo de los rosarinos también, partiendo por Lionel Messi, la gran estrella del fútbol actual.

A la "Pulga" se suma que la ciudad es la cuna del "Bielsismo". El ex técnico de Chile es el gran ídolo de Newell's Old Boys (el estadio lleva su nombre) por sus éxitos y pasión como entrenador de Newell's, tarea en la que también "formó" a varios jugadores que se convirtieron en técnicos siguiendo en mayor o menor parte su estilo, como Darío Franco, el DT de la "U".

Y aunque hay más clubes, la rivalidad entre Newell's y Rosario Central, para algunos un clásico más bravo que Boca-River, también ayuda a levantar el cartel de capital del fútbol argentino.

De ese choque nació una historia que demuestra el fanatismo que se vive en la ciudad. El 19 de diciembre de 1971, se enfrentaron por la semifinal del Torneo Nacional de AFA. Ganó Rosario (que después se quedaría con el título) con un gol de palomita de Aldo Pedro Poy. La conquista marcó tanto a los hinchas, que cada año en la misma fecha, los fanáticos se reúnen con Poy para que se vuelva a lanzar y gritar otra vez la conquista. Incluso, han realizaro el ritual en otros países como Chile, Cuba (en el video) y Estados Unidos.

Pero hay muchos más nombres, como César Luis Menotti, técnico campeón con Argentina en 1978. La rivalidad entre el estilo del "Flaco", ligado al toque, la estética y el juego asociado, y Carlos Salvador Bilardo (campeón en el Mundial de 1986), más pragmático, es otro hecho que aumentó el sentimiento de los rosarinos de ser una ciudad clave para el fútbol.

Darío Franco se formó en Newell's, por lo que conoce muy bien esta historia. Y por eso espera con la "U" dar la sorpresa en la capital del fútbol argentino.