Universidad de Chile consiguió una trabajada victoria en Paraguay que le permitió más de una distinción: Avanzar en Copa Libertadores y convertirse en el primer equipo chileno en ganar en todo el continente.

La responsabilidad le correspondía a los locales, y el "Cacique" paraguayo respondería. La "U" se encontró en cancha con un equipo agresivo, que no salió a especular y que, por el contrario, apostó por disputar el control del balón para anular la ventaja chilena.

Su libreto parecía bien aprendido: Posesión, y balones largos para sortear el poblado mediocampo azul, y complicar a la línea de tres defensores, compuesta por Osvaldo González, Matías Caruzzo y José Rojas. Así también lo había anunciado el técnico español Fernando Jubero en la previa del partido: "Ellos (U. de Chile) se ven incómodos sin la pelota". Efectivamente, el cuadro universitario no lo estaba pasando bien.

Cuando el envión anímico del inicio de partido había pasad, hubo un respiro para el equipo de Cristián Romero. Incluso, pudo llegar la apertura de la cuenta cuando Rodrigo Mora estrelló un balón al poste en el minuto 17, tras gran habilitación de Roberto Cereceda.

Sin embargo, la "U" volvería a atorarse producto de la impresición y el ímpetu del rival. Por largos ratos el juego se desarrolló en campo propio, sin encontrar la salida adecuada ni por las bandas a través de Francisco Castro y Cereceda, ni por el centro con un Ramón Fernández muy desaparecido.

El enredo azul terminaría por pasar la cuenta a falta de cinco minutos para el descanso. José Rojas intentó un tosco despeje de una pelota que se paseaba por el área, pero un rebote se convertiría en un centro perfecto para Fernando Fernández, que cabeceó y superó a Luis Marín para decretar el empate en el global.

El ahogo aurinegro se sostendría en el inicio de la segunda etapa, y la "U" acusaba la asfixia. Pero uno que no se había mostrado, escogió el momento preciso para decir presente y meter nuevamente al cuadro chileno en el partido. Ramón Fernández recibió libre en los 53', a treinta metros del arco, y se despachó un remate imposible para Alfredo Aguilar.

El empate obligaba a anotar dos goles extras a los paraguayos. Sin embargo, el cuadro "aborigen" no se iba a achicar y pronto volverían a acortar distancias gracias a un error de Luis Marín en el fondo. Una salida a destiempo del arquero, titular producto de la suspensión de Johnny Herrera, le permitió a Jorge Benítez, que llevaba tres minutos en cancha, adelantar nuevamente a los locales.

Pero el error no fue casualidad. El equipo de Romero se vio particularente vulnerable en defensa y cada ataque de Guaraní era sufrimiento para la hinchada azul que llegó al Defensores del Chaco. Al otro lado de la cancha la situación tampoco era muy distinta, y un nuevo gol anunciaba su llegada en cualquier momento y para cualquier equipo.

Los chilenos fueron los afortunados, pues una gran jugada colectiva en los 75' encontró a Castro muy solo por la derecha para enviar un centro rasante que fue conectado por Isaac Díaz, en cancha desde los 58'.

Con la clasificación prácticamente en el bolsillo, solo restaba una tarea. Un triunfo les permitía convertirse en el primer equipo chileno en ganar en todo el cono sur, y Patricio Rubio sería el hombre que sellaría la nueva distinción. En los descuentos, solo tuvo que empujar el balón en una contra para cerrar definitivamente el partido a su favor.

De esta manera, Universidad de Chile formará parte del Grupo 5 del torneo, junto a Cruzeiro, Defensor Sporting y Real Garcilaso.