Con ánimo de recuperarse rápido tras un viaje que se extendió más de lo presupuestado por el retraso del vuelo, el plantel de Universidad de Chile arribó a Río de Janeiro para disputar este jueves el duelo de ida por los cuartos de final de la Copa Sudamericana ante Fluminense.
Pero como el vuelo desde Santiago partió con cuatro horas de retraso, la práctica que tenían presupuestada en las canchas de Fluminense fueron suspendidas, por lo que sólo realizarán un pequeño trabajo regenerativo tras la cena en el gimnasio del hotel de concentración.
"Fue un viaje largo. Fueron bastante horas por los atrasos, pero ya estamos acá. Hay que recuperarse rápido, moverse un poco y descansar para pensar en lo que viene", señaló a Radio Cooperativa el delantero Juan Manuel Olivera.
Sobre el momento en el que llega Fluminense, el uruguayo aclaró que "no deja de ser un cuadro peligroso. Ellos van a querer cerrar el año con un torneo internacional, así que no hay que confiarse ni descuidarse. Que vengan mal en el torneo local no dice nada, aparte nosotros tampoco estamos haciendo un torneo extraordinario".
Finalmente Olivera se refirió a la crisis interna del plantel azul, aunque aclaró que "se publicaron cosas ciertas y otras no. Cuando hubo que aclarar algo se aclaró. Ahora hay que abocarnos a los futbolístico. Si hubo algo ya está aclarado, y ahora vamos todos para adelante con un mismo objetivo".