La Unión Europea y la ONU pidieron hoy responsabilidades por el supuesto ataque con armas químicas en la localidad siria de Jan Shijún, en el sur de la provincia septentrional de Idleb, que causó al menos 58 víctimas y que empañó los preparativos de la conferencia de mañana en apoyo al país.
"Lo que pasó esta mañana es horrible y vamos a pedir clara identificación de los responsabilidades", declaró el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, en una rueda de prensa junto a la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini.
"Aún no tenemos una confirmación oficial o fiable" de lo ocurrido, afirmó el político sueco naturalizado italiano: "Lo que hemos entendido es que fue un ataque químico que vino del aire".
Aseveró que pedirán información "a todos los que tengan la capacidad de averiguar técnicamente lo que pasó para poder ser más precisos".
También Estados Unidos condenó el "reprobable" supuesto ataque químico en Siria, que atribuyó al régimen del presidente Bachar al Asad, y alertó de que "no puede ser ignorado por el mundo civilizado".
"Estados Unidos respalda a nuestros aliados de todo el mundo en la condena de este acto intolerable", declaró Sean Spicer, el portavoz del nuevo presidente de EEUU, Donald Trump.
El Consejo de Seguridad de la ONU celebrará mañana una reunión de urgencia para abordar este ataque, mientras que la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) expresó su "grave preocupación" y aseguró que ya está reuniendo y analizando información sobre lo sucedido.