La oferta para adquirir la casa de modas del diseñador francés Christian Lacroix que presentó el propio modisto junto al grupo italiano Borletti recibió hoy el apoyo del Gobierno francés.
De esa manera, a la salida de su encuentro con el ministro galo de Industria, Christian Estrosi, Lacroix señaló que estaba "animado con la idea de continuar" con la actividad de la casa de costura que lleva su nombre, después de que se declarara en suspensión de pagos el pasado mayo.
En el caso de que el administrador judicial opte por la oferta del diseñador hay dos más, la de la consultora Bernard Krief Consulting (BKC) y otra que ofrece un euro por quedarse con el control de la casa, Lacroix se comprometió a realizar "todo aquello que se frenó en el pasado".
"Vamos a dejar de hacer prêt-à-porter de gran difusión por el momento, para concentrarnos en la alta gama, con productos que estarían entre la alta costura y el prêt-à-porter de lujo", afirmó el creador.
En este sentido, comentó que "es una casa que no tiene todavía el perfume que merece, lo que es un aspecto que queda por desarrollar, así como una línea de baño".
En cuanto a los despidos, que también contempla su oferta, Lacroix comentó que se van a "intentar salvar el máximo número de empleos con el plan" que propone.
APOYO
El creador francés se reconoció "confiado" por el apoyo del Gobierno y de la gente de la calle que le desean buena suerte, lo que le da muchos ánimos y valor.
En representación del Gobierno francés, Estrosi apuntó que Lacroix "es una personalidad que representa un patrimonio importante de la cultura, del saber hacer y de la alta costura francesa, a la que ha contribuido durante años".
"El Gobierno quiere dejar testimonio hoy de su solidaridad al plan que ayer presentó Lacroix, con la esperanza de que sea el mejor", dijo el titular de Industria, aunque puntualizó "que será el administrador quien elija".
Ayer terminó el plazo para la presentación de ofertas por Christian Lacroix, propiedad desde 2005 del grupo estadounidense Falic y que en 2008 registró unas pérdidas de diez millones de euros.