La presidente del PS, Isabel Allende, pasó el fin de semana largo en su parcela de Curacaví y recién hoy, en el Congreso, se reencontrará cara a cara con los diputados y senadores socialistas, muchos de los cuales siguen sorprendidos por su abrupta decisión -comunicada el viernes pasado- de desistir de ir a la carrera presidencial.
En el círculo más estrecho de la timonel PS y en los militantes de la colectividad varios quedaron heridos por una determinación en la que, creen, mucho tuvo que ver Ricardo Lagos, que la noche anterior había tenido una conversación sobre el tema con la senadora.
Es en ese cuadro en que comienza una semana corta, pero que será clave para la opción presidencial del ex mandatario.
Previo a la claudicación de Allende, el PS había convocado al pleno del comité central a reunirse este sábado 5 para abordar el mecanismo de definición de su abanderado. En ese momento, en el partido había una inclinación pronunciada por la opción de exigir una primaria interna en que se medirían Allende y Lagos, además de los otros militantes interesados en impulsar una candidatura.
Luego del viernes, sin embargo, el objetivo y la conveniencia de realizar el encuentro tan pronto están en tela de juicio transversalmente: tanto por los partidarios de otorgar un respaldo inmediato al ex Presidente Lagos, como por quienes están en contra de esta posibilidad.
"Habría que hacer un duelo. Dejar que se aplaquen las pasiones", dice para graficar un dirigente socialista. En su opinión, el comité central debería postergarse en al menos dos semanas para curar "sanar" las heridas que dejó la caída de Allende.
La mesa del PS se reunirá recién mañana en la tarde para evaluar la posibilidad de postergar el encuentro partidario, pero varios parlamentarios tienen contemplado analizar el tema hoy con la propia Allende, en el Congreso. De todas formas, en el partido admiten casi de forma unánime que ya sea este sábado o el subsiguiente, el resultado predecible del central sería que el partido decantará por Lagos.
Esta posibilidad es rechazada por el también potencial presidenciable Fernando Atria, quien insistió ayer en que pese a la decisión de Allende, el comité central se limite a una definición instrumental. "Esperaría que el pleno lo que decidiera fuera sobre el mecanismo y que el mecanismo fuera primarias abiertas a la ciudadanía. Una decisión cupular del partido (de proclamar a Lagos) sería nefasta tanto por lo que representa Lagos para la ciudadanía como porque el partido mostraría inmunidad a la presión ciudadana por mayor legitimación democrática", manifestó el abogado constitucionalista.
El futuro del también posible presidenciable José Miguel Insulza es otro de los factores que el partido debe despejar en los próximos días. El agente de Chile ante La Haya ha asegurado que mantiene su intención de competir, sin embargo, en el PS crece la presión de algunos sectores porque decline su candidatura.
En esta línea se manifestó ayer el jefe de bancada del PS, Juan Luis Castro, quien expresó a radio Cooperativa que "lo lógico es que el Partido Socialista postergue unos días más el cronograma electoral y precise la situación de Insulza, que todo indica que ya estaría adoptando el camino de permanecer en el Gobierno y no ser candidato".
Al respecto, el senador Fulvio Rossi añadió que "ojalá Insulza y Lagos puedan llegar a un acuerdo, porque tienen un camino recorrido en conjunto, fueron parte del mismo gobierno y representan lo mismo, por lo que no sé si tenga sentido tensionar las cosas".
En tanto, el jefe del comité de senadores, Carlos Montes, quien aseguró que si bien el partido "se ha ido decantando por la opción de Lagos", el comité central debe adquirir ahora un completo nuevo sentido, pues "estamos en un minuto muy importante de definiciones y propuestas, y hay que ver cómo terminamos este gobierno y cuál va a ser el carácter y el programa del próximo".