Lan-Airlines explicó que el aterrizaje de emergencia que realizó un avión que se dirigiría a La Serena se debió a un "desperfecto menor".
A través de un comunicado de prensa, la compañía confirmó que el vuelo LA-300 debió retornar al Aeropuerto Arturo Merino Benítez a las 08.30 horas, media hora después de haber despegado del terminal aéreo.
"La compañía lamenta profundamente los inconvenientes y molestias que esta situación ha causado a sus pasajeros, sin embargo reitera una vez su permanente compromiso con la seguridad", consigna el documento.
A pesar de esta medida, que obligó a los pasajeros a tomar otro vuelo con destino a La Serena a las 10 de la mañana y que llegó pasadas las 11.10 horas a su destino, comunicó que de acuerdo a la normativa aeronáutica no fue necesario declarar emergencia.
Por lo que la aerolínea aseguró que la seguridad de sus pasajeros no se vio en ningún momento afectada y que se "le dieron todas las facilidades para continuar su vuelo".
A bordo del avión afectado iban los senadores Jorge Pizarro y Gonzalo Uriarte, quienes relataron que a los 10 segundos de que el avión se alejara de la pista comenzó a sentirse un olor a quemado.
Luego, el capitán informó a los pasajeros que estaba todo controlado y les pidió que juntaran las cabezas con las rodillas, consignando que el avión se devolvería.
Cabe consignar que este procedimiento responde a un protocolo de aterrizaje de emergencia, ya que el capitán debe preparar a la cabina para esta situación. Ya que poner la cabeza entre las rodillas es la forma más segura de recibir un impacto al momento de aterrizar de esta forma.
Según el presidente del Senado, Jorge Pizarro, el personal de la línea aérea reaccionó bien a la emergencia.