El ciclista estadounidense Lance Armstrong, quien fue despojado de sus siete títulos del Tour de Francia por dopaje, está pensando en la posibilidad de admitir que utilizó sustancias prohibidas para mejorar su rendimiento, según informó The New York Times.

Armstrong dijo a allegados y funcionarios antidopaje está considerando la posibilidad de admitir el uso de dopaje sanguíneo  durante su carrera  en un esfuerzo por restaurar su credibilidad, por lo que podría convertirse en un atleta competitivo otra vez, señaló el diario.

El Times no identificó sus fuentes, pero citó "a varias personas con conocimiento directo de la situación."

La UCI (Unión Internacional de Ciclismo) borró a finales del año pasado a  Armstrong de los libros de historia de este deporte, cuando decidió no apelar  sanciones impuestas por la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA).

Un demoledor informe de USADA llegó a la conclusión de que Armstrong ayudó  a coordinar el programa antidopaje más sofisticado en la historia del deporte.  El informe incluye cientos de páginas con testimonios de testigos, correos  electrónicos, registros financieros y análisis de laboratorio de muestras de  sangre.

No obstante los informes detallados de la lucha contra el dopaje y una serie de otros acusadores, incluyendo ex compañeros estadounidenses, Armstrong  negó siempre haber ocupado sustancias no permitidas.

Tim Herman, abogado de Armstrong, dijo al Times que no tiene noción de que su cliente tenga planes de admitir su culpabilidad.

"No sé de eso. Supongo que todo es posible, seguro. En este momento,  realmente no está sobre la mesa", declaró Herman.