Íñigo Aguirre, Premio Autor Revelación 2010 en el Salón del Cómic de Madrid,  lanzó la segunda entrega del cómic "Ibéroes" que cuenta con el trabajo del colorista de Marvel y DC, Javier Tartaglia.

Aguirre, explica que, "Ibéroes es un cómic hecho a la manera americana, pero en el que los personajes se comportan muy a la española: se van al bar a tomar un café, se toman el pelo entre ellos, se gritan y se reconcilian. Son más humanos que nuestros vecinos 'yankies' y ese es el punto que los hace diferentes ".

Muchas de las ambientaciones que envuelven a la historieta se desarrollan en la ciudad Jerez de la Frontera en Andalucía o en la ruta del bakalao.

El autor explica que, "las ambientaciones son uno de los principales alicientes de la serie; todos hemos visto al Capitán América luchando en las calles de Nueva York, pero es difícil verle luchar en el puerto de Barcelona o en la Gran Vía madrileña. El sueño de muchos fans ha sido siempre leer batallas de superhéroes que transcurren en la puerta de su casa, y eso es precisamente lo que contamos en Ibéroes".

El cómic de aventuras tuvo 2.100 ventas durante su primera entrega, por lo que esta segunda entrega tiene buenas perspectivas y Aguirre reconoce que "Son buenos resultados; no hay que olvidar que es un cómic hecho sin ningún respaldo editorial, un poco a lo Juan Palomo. Entre Javier -que vive en Argentina- y yo nos lo organizamos todo".

Aguirre es de la generación de españoles que ha crecido con Mortadelo y Filemón y nuestros clásicos de la viñeta, pero se reconoce influido por el superhéroe americano, como la mayoría de "los niños de los años ochenta".

El guionista y dibujante explica que, "hoy es difícil vivir del cómic en nuestro país; lo más razonable, si te gusta dibujar es buscar trabajo en los mercados americano y francés. Hay una cierta fuga de talento en lo que al cómic español se refiere", motivo por el que reclama el apoyo de instituciones y editores.