El senador de la UDI Hernán Larraín reafirmó esta mañana su postura contraria a la idea de su compañero de partido, el también senador Pablo Longueira, quien ayer se manifestó partidario de la posibilidad de convocar a un plebiscito para buscar una solución a la demanda marítima boliviana.

Además, también expresó enérgicamente su rechazo a las declaraciones del Presidente peruano Alan García, quien afirmó que es "injusto" que Bolivia no cuente con una salida al mar, y dijo que Perú no será un obstáculo para las aspiraciones bolivianas.

"Las definiciones fronterizas son materia de política exterior que reflejan el interés permanente de Chile. Esto es un asunto de Estado y, por lo tanto, sólo le compete a Chile, y Alan García no tiene nada que meterse en lo que no le importa. Este es un problema que se refleja en el ejercicio de la soberanía de nuestro país  y si hay alguna demanda o alguna cuestión con algún país vecino como es Bolivia, pues es un problema entre Bolivia y Chile", afirmó Larraín.

En esa línea, y tras las declaraciones de Alan García y las de Longueira, Larraín dijo que "cuando un país tiene su delimitación fronteriza fundada en tratados internacionales, la revisión de uno abre el apetito de otro para reivindicaciones que otros puedan tener, y por eso ha sido una sola política la de Chile: que los tratados no se tocan".

"No es serio, conveniente ni nunca es oportuno abrir un debate que pueda dejar a Chile en la incertidumbre territorial. En esto hay que ser serios y defender los intereses de Chile", agregó.

Consultado sobre los dichos Longueira sobre los beneficios en materia de gas y agua y la posibilidad de un plebiscito para entregar acceso soberano al mar para Bolivia, el senador sostuvo que "la configuración del territorio de Chile no se compra ni se vende por más gas o por menos gas, ni más agua o menos agua, ni por más opciones coyunturales de carácter económico. El territorio es uno solo y sobre esa base se asienta un Estado una historia que no la vamos a borrar por circunstancias coyunturales".

En esa línea, Larraín, quien convocó a una conferencia de prensa esta mañana especialmente para referirse al tema, afirmó que "definir estas situaciones por el camino de un plebiscito me parece también extraordinariamente equivocado. El plebiscito no está en nuestra Constitución. No está, salvo para una hipótesis específica de conflictos en las reformas constitucionales. Y, en general, en las democracias modernas, en las democracias representativas, los plebiscitos no son instrumentos utilizados en forma generalizada, sino muy excepcionalmente.

"Las conversaciones que están llevando Chile con Bolivia son muy serias. Tenemos una agenda de 13 puntos con Bolivia, pero debemos tener buena voluntad de Bolivia, entonces también les pedimos que, si quieren mejorar su acceso al mar, resolvamos nuestros temas menores como el del Silala. Hay voluntad de Chile por avanzar", sostuvo.