Previo a la votación de esta tarde en el Senado del proyecto de incremento de 6% del salario mínimo, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, volvió a defender la propuesta del Ejecutivo que reajusta el sueldo básico mensual hasta $193.000.

"Hemos hecho una propuesta que nos parece razonable, son $11 mil más que el salario mínimo que existe actualmente", recalcó el titular de Hacienda.

Larraín añadió que gran parte las personas que ganan el  salario mínimo tienen acceso a dos subsidios, "el subsidio de empleo juvenil de $32 mil, estas personas con $193.000  quedan en $225.000 y como parte del nuevo mecanismo de ingreso ético familiar está el subsidio de empleo mujer, para mujeres que pertenezcan al 40% más vulnerable de la población entre 25 y 60 años de edad. Es decir para aquellas que ganan entre $160 mil y $200 mil, tienen $32.000 de subsidio".

Agregó que las potenciales beneficiadas con este subsidio suman unas 300 mil personas.

Frente a las peticiones de la directiva de Renovación Nacional que pide acercar el sueldo básico a $200.000, el ministro de Hacienda aseguró que el salario mínimo no es problema del sector público en lo fundamental, sino de las pequeñas y medianas empresas que otorgan empleo a los trabajadores con menor calificación.

"Que más querríamos nosotros que se ganara $200.000 y más que eso, pero no podemos decir que sí a las peticiones que se hacen y dejar sin empleo a los que tienen menos", aseveró.

"Hay cosas que se pueden hacer en una economía sana, pero en un escenario externo complejo, cuando las cosas no se hacen bien hay muchos países afectados. A veces, a algunos se les olvida lo que pasa fuera de Chile, y es pedir y pedir con el tejo pasado, sin pensar en las consecuencias de lo qué significa, y nosotros seguiremos actuando con seriedad, para tener empleo y mejora sostenida en los salarios", recalcó.

La autoridad añadió que "el llamado es general a todos los actores sociales y políticos, es simpático pedir más, pero como en una familia, el jefe de hogar debe decir que no muchas veces, no se puede acceder a todo lo que piden los hijos, uno debe decir no, pero con cariño".

Larraín insistió que Conapyme dijo que apoyaba el reajuste del gobierno. "Hay muchos que hablan de las pymes y que a la hora de discutir el salario mínimo se olvidan de las pymes. Nosotros también
queremos que la gente gane más, pero tenemos que pensar en este delicado equilibrio. El grueso de quienes gana el salario mínimo están en las pymes, este no es un problema de la gran empresa".

El ministro Larraín también hizo un llamado a la responsabilidad a los dirigentes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) que convocaron para mañana a una movilización para impulsar un piso salarial de $250.000.

"Nosotros siempre estamos abiertos al diálogo, en este caso nosotros lamentamos que pesar de haber estado abiertos, no estaban disponibles para dialogar con el gobierno. No hemos sido nosotros los que hemos cerrado las puertas al diálogo, y hacemos un llamando a la responsabilidad, ellos son libres de hacer lo que les parezca", dijo.

ESCENARIO EXTERNO

El jefe de la billetera fiscal, asimismo, puso una nota de cautela frente a las nuevas señales de desaceleración de la economía internacional: "Hay gente que no ve o no quiere ver lo que está pasando en el mundo. Las cifras de China y de Japón hablan de una nueva desaceleración de la economía mundial, por lo tanto creo que hay tomarlas en cuenta. La economía chilena sigue creciendo en un escenario adverso, y en algunos casos muy adverso y no es sólo China y Japón, Estados Unidos tuvo un índice de producción manufacturera bastante bajo lo esperado, en Europa, aunque las noticias de la semana pasada fueron bastante mejores, está enfrentando una recesión, por tanto me parece que es algo que debe tomarse en cuenta".